“Llevame a mi casa”, habría pedido Yessenia Suyén Montenegro Morán al taxista Marvin José Martínez Rosales, quien sospechaba que la muchacha de 24 años “presentía que Douglas (Antonio Zamora Vallez) le podía hacer algo si se quedaba” en la tienda de la gasolinera, donde minutos después fue asesinada de un balazo en la cabeza.
Habían avanzado unos 50 metros, pero Zamora Vallez llamó a Martínez diciéndole que bajara a Montenegro del vehículo.
El taxista detuvo la marcha. Zamora llegó hasta el vehículo y “ordenó a la joven que se bajara, ahí Douglas llevaba un arma en la mano, le puso el seguro y se fueron caminando… mientras Martínez se fue, reanudando su trabajo como cadete”, refiere el testimonio que eventualmente rendirá en juicio.
Así lo ofreció la Fiscalía este 23 de enero, en la audiencia inicial del proceso que Zamora enfrenta por el femicidio de Montenegro, siendo acusado también de portación ilegal de armas. Con él está siendo procesado Jesser Maudiel Canales López, como presunto autor del “delito conexo” de encubrimiento.
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La juez especializada en Violencia de Género, Ivania Sancho, decretó la privacidad de esa audiencia, impidiendo el ingreso de Jasmina Morán Rodríguez, madre de Montenegro; del acusador particular, Freddy Rizo y de los medios de comunicación.
Además del testimonio de Martínez, en la audiencia, la Fiscalía ofreció las declaraciones de 32 personas más, entre particulares que presenciaron el crimen ocurrido a las 4:20 a.m. del 8 de enero recién pasado, familiares y amigos de Montenegro, policías que investigaron y peritos, incluyendo entre estos a la forense Madalym Valdivia.
Brenda Alvayero Rodríguez, defensora particular, pidió a la juez Sancho que ordenara la mejora y sustento del intercambio ofrecido por la Fiscalía, porque considera que “no hay un testigo que vincule directamente a Douglas en los hechos acusados, únicamente establecen la relación de pareja que tenían y establece la relación laboral que tenía Yessenia en el casino”.
Víctima quería ir a su casa
Según las diversas declaraciones que la Fiscalía ofreció como pruebas contra Douglas Zamora y Jesser Canales, la madrugada del 8 de enero, Yessenia Montenegro salió a las 3:35 a.m. de su trabajo.
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En un taxi, que conducía un hombre llamado “Armando”, la muchacha fue al bar donde Zamora estaba con Canales, además de Eddy José Ríos Blandón y dos adolescentes mujeres.
Minutos después, Zamora llamó a Marvin Martínez, quien manejaba el taxi placa MT 222, el mismo en el que el primero también hacía turnos nocturnos como cadete. En ese vehículo fueron a la gasolinera. Zamora le dio el arma a Montenegro para que la llevara en el bolso. Todos bajaron a la tienda, menos la víctima, que pidió al taxista que la llevara a su casa, pero Zamora llamó al conductor y le dijo que no se moviera, luego regresó al auto, tomó la pistola y obligó a la mujer a bajar y entrar al sitio donde le disparó.
Juez recusada
Gilbert Burgos, defensor particular de Jesser Maudiel Canales, acusado de encubrimiento, recusó a la juez “por enemistad”, pero aclaró que “no es nada personal contra ella ni para atrasar el procedimiento, porque el encubrimiento es contra la administración de justicia y nada tiene que ver la Ley 779”. Sancho dio lugar a la recusación evitando pronunciarse sobre el intercambio de pruebas ofrecido por la Fiscalía, de modo que el proceso será reanudado una vez que la Sala Penal del Tribunal de Apelaciones de la Circunscripción Norte resuelva lo planteado por Burgos.
