El Gobierno de Nicaragua volvió a hacer pública la pretensión de construir la Carretera Costanera o Ruta Turística del Pacífico, proyecto que se ha querido materializar desde la administración presidencial del ingeniero Enrique Bolaños Geyer (2002-2006) y que por falta de recursos económicos no se logró.
Fue en su acostumbrada intervención de mediodía que Rosario Murillo, vicepresidenta designada por el Consejo Supremo Electoral (CSE), reveló que se trabaja para, en los próximos días, presentar avances de esta obra vial que empezará en la frontera sur del país y se extenderá hasta Masachapa.
“Empezamos a trabajar en el primer tramo en las próximas semanas”, anunció Murillo, quien prometió detalles del proyecto en una de las actividades próximas que tenga el Ejecutivo.
Este proyecto carretero, prometedor para explotar el turismo en la franja del Pacífico, según Murillo, empezaría en la frontera sur, cruzaría por El Naranjo, Ostional, La Flor, Playa El Coco, Marsella, Las Maderas, Majagual, Guacalito, El Gigante, Tupilapa, Huehuete, Casares, La Boquita y Masachapa.
Señal de retomar Carretera Costanera
Aunque fue hasta este martes que el Gobierno se refirió al tema de la Carretera Costanera, la intención de construirla se vio reflejada en la presentación que se le hizo a misiones diplomáticas en octubre de 2016, sobre los aspectos relevantes de la Ley Asociación Público Privada (APP).
En ese entonces Laureano Ortega, de la agencia de inversiones ProNicaragua e hijo de Daniel Ortega y Rosario Murillo, mencionó la Carretera Costanera como uno de los 33 proyectos que se podían trabajar en el próximo quinquenio.
Pero referente a la noticia de este martes, Lucy Valenti, presidenta de la Cámara Nacional de Turismo de Nicaragua (Canatur), expresó su aprobación, porque el proyecto lo ve como una prioridad para desarrollar el turismo de Nicaragua, más en la zona del Pacífico.
Han insistido al Gobierno
“Nosotros hemos venido insistiendo en las últimas conversaciones que ha habido con la Presidencia en la necesidad de esa carretera, hemos venido insistiendo que la zona de San Juan del Sur y Tola sean de prioridad turística, porque hay bastantes inversionistas (interesados) en desarrollar inversiones en esa zona y se requiere de cierta infraestructura para apoyar el desarrollo”, manifestó Valenti.
El impacto que generará la Costanera, a juicio de Valenti, no solo será en fomentar el desarrollo de las inversiones, sino que también “creará nuevas oportunidades que desarrollen proyectos para abastecer de servicio y productos a los restaurantes que se instalen, negocios pymes (pequeñas y medianas empresas)”.
Organismos financieros sin interés en prestar
LA PRENSA conoció que el problema que impedía el desarrollo de la Carretera Costanera históricamente ha sido porque cada kilómetro de vía costaba más de 1 millón de dólares y que eso no fue atractivo para que los organismos financieros desembolsaran fondos y con presupuesto propio no era posible construirla completamente.
En 2004 Bolaños trató de hacerla realidad, pero no logró ni elaborar el estudio de factibilidad. “Nunca pudimos conseguir que nos dijeran ‘hagamos un estudio de la carretera y démosle inicio’”, dijo a LA PRENSA el expresidente en agosto de 2013.
En el gobierno de Ortega
Otro intento llegó cuatro años después, ya bajo el mandato de Ortega. En ese entonces el titular del Instituto Nicaragüense de Turismo (Intur) era Mario Salinas, quien dijo que la propuesta de Bolaños era muy cara y “utópica”, al calcularse entre 250 millones de dólares y 300 millones de dólares, por lo que prometió rediseñarla.
“En los próximos tres meses (marzo, abril, mayo) tendremos completados los rediseños y estaremos iniciando la construcción a finales de este año (2008); construcción que durará alrededor de año y medio.
Después de ese período la estaremos inaugurando, donde nos estaremos conectando, prácticamente, desde Costa Rica hasta el Golfo de Fonseca”, aseguró Salinas en ese entonces.
Construcción total tomaría tres años
Según expertos en Ingeniería, la construcción de toda la Carretera Costanera tomaría cerca de tres años y que la elaboración del diseño andaría por un año.
No obstante, Murillo aclaró que el proyecto irá por partes y que en las próximas semanas iniciarán con el primer tramo vial.
