Los ánimos en los Juzgados de Masaya se vieron caldeados este jueves, y no precisamente por el ardiente sol del mediodía, sino por un enfrentamiento judicial que mantienen la familia del detenido José Luis Aguirre y los familiares de su exsuegra Luisa Amanda Torres, ambos originarios de la ciudad de Masaya.
Los manotazos, la rabia y las ofensas salieron a relucir frente al portón del complejo judicial, porque Aguirre continúa detenido, acusado de robo agravado en la propiedad de Torres, en noviembre del año pasado, mientras la otra parte exige respuesta de las pérdidas económicas por el producto supuestamente robado.
“A él (Aguirre), yo no le dije que se metiera a robar a mi casa, me lo llevé a trabajar a la Isla de Ometepe, pero se vino de allá hasta aquí, a introducirse a mi casa con tres hombres más, agarré a dos muchachos con mi mercadería, de la cual tengo mi factura, y ellos me dijeron que había sido mi yerno, cuyo monto ronda como cinco mil dólares”, dijo la afectada.
Asimismo, aseguró que interpondría denuncia por agresión fuera del recinto, en perjuicio de sus dos hijas que en ese momento la acompañaban.
En tanto los familiares del acusado, aseguraron que todo se debe a un montaje, que el muchacho es honrado y que los comerciantes del mercado municipal de Masaya, que acompañaban a la familia, dan fe de su comportamiento.
“José Luis tiene su crédito y es una persona trabajadora. Ella (Torres) pide 90 mil córdobas, es más de lo que cuesta la mercadería, si efectivamente fuese verdad. Nuevamente solicité el arresto domiciliar, porque mi cliente está endeudado, porque tiene mercadería distribuida que debe cobrar. Pedimos libertad para él, porque todo es injusto. Tenemos suficientes pruebas para demostrar la inocencia de mi representado, porque las faldas (supuestamente sustraídas) fueron encontradas en Tipitapa”, mencionó Teresa María Juárez, abogada defensora.