El comisionado mayor Fernando Borge, segundo jefe de la Policía de Managua, desalojó a un grupo de cinco jóvenes que había decidido iniciar este martes una huelga de hambre frente a las instalaciones de la Organización de Estados Americanos (OEA), en rechazo a los acuerdos que el secretario general de ese organismo, Luis Almagro, suscribió con el presidente designado Daniel Ortega, el pasado 20 de enero.
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Luis Herrera, miembro de la organización política Juventud Rebelde y uno de los que iba a unirse a la huelga, relató a LA PRENSA que instalaron la champa a las 9:00 a.m. frente a la OEA, ubicada en Las Sierritas de Santo Domingo, Managua, pero a las 4:30 p.m. se presentó el comisionado Borge en una camioneta policial acompañado de otros oficiales para desmontar el plantón sin mediar palabra.
“Cuando nosotros íbamos buscando la salida, nos emboscaron las turbas orteguistas en camionetas y motos y nos agredieron, nos robaron las mantas”, denunció Herrera.
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El joven explicó que su intención era permanecer junto con cuatro personas más en un plantón indefinido en las afueras de la OEA.
El pasado 20 de enero, el Gobierno de Nicaragua y la OEA presentaron un informe conjunto luego de los tres meses de diálogo en el que el organismo regional se compromete a acompañar las elecciones municipales de 2017 y se dan un plazo de tres años para valorar si hay cambios electorales en Nicaragua.
Sin embargo, analistas políticos y juristas nicaragüenses consideran que “deja mucho que desear” el acuerdo entre el Gobierno de Nicaragua y la OEA, porque ven “excesivos” los tres años establecidos para que se den cambios técnicos en torno a lo electoral y no satisface la demanda principal de convocar a nuevas elecciones generales y renovar a lo inmediato el poder electoral para retornar la confianza en el resultado de los comicios.