Para evitar que el inminente ingreso de arroz con cero arancel procedente de Estados Unidos “mate” a los arroceros locales, el sector tramita el establecimiento de un fondo de compensación, que permita amortiguar las pérdidas que le provocará al productor vender el grano a precios menores al costo de producción.
Adicionalmente, ellos continuarán en la búsqueda de mecanismos para elevar la productividad y reducir sus costos de operación.
“Ese fondo saldrá de la actividad del arroz, es decir, de todos, de la producción nacional y de la importación”, anunció Amílcar Ybarra, presidente de la Asociación Nicaragüense de Procesadores de Arroz (ProArroz).
La propuesta ya fue presentada al Gabinete de Producción, Consumo y Comercio. “Esta es una cosa delicada y el Gobierno se está tomando el tiempo necesario para estudiarlo, ver todas sus implicaciones, el impacto que puede tener para los consumidores, productores y la administración de los tratados y convenios internacionales para que cumplamos con todo”, explicó Ybarra.
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Aún no se define cuál será el mecanismo ni cuánto será el aporte para alimentar dicho fondo, pero según el dirigente de ProArroz, “todo dependerá de los precios internacionales, si los precios están altos, el fondo (aporte) será bajo, pero si los precios están bajos, el fondo será más grande”.
Además, aseguró que este “siempre será más barato que el 45 por ciento de arancel que actualmente tiene el arroz granza en casi todo el mundo, porque en Estados Unidos está en 37 por ciento y es el que va a ir a cero” al concluir el proceso de desgravación del Tratado de Libre Comercio entre República Dominicana, Centroamérica y Estados Unidos (DR-Cafta, por sus siglas en inglés), que inició en 2016 y concluye en 2023.
Con dicha desgravación “en Nicaragua el arroz va a variar de precio, de 22 dólares va a variar a 9, 11 o 13 dólares (por quintal) y eso tiene un beneficio para el consumidor, pero va a matar al productor”, dijo Ybarra.
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Por su parte, el presidente de la Asociación Nicaragüense de Arroceros (Anar), Ulises Espinoza, dijo que “no es justo que por un tratado de libre comercio que no supimos negociar en su momento se nos vaya todo al piso, creo que hay cosas que todavía se pueden hacer. Desde Anar no impulsamos que se anule el tratado, lo que decimos es que se revise y se busquen mecanismos que le ayuden a la cadena del arroz”.
De momento la solución que encuentran es crear “un fondo para compensar esa caída… La industria le va a pagar 12 dólares pero va a pagar un fondo de compensación para que le suba la industria el costo de 12 a, digamos, 16 (dólares por quintal), con eso se genera un fondo para todos”, explicó Ybarra.
Además, aclaró que este no será un “subsidio” al productor, sino un fondo de compensación al productor, que además beneficiará a los consumidores, ya que tendrán acceso a arroz con precios más bajos que los actuales.
El sector aún no sabe si el Gobierno aceptará esta propuesta, pero confía en que sí lo hará y espera que sea pronto, antes que concluya este año, ya que de no hacerlo, el impacto de la reducción de los aranceles se va a comenzar a sentir en los precios internos.
“No hay que esperar a 2023, esto no aguanta, esto ya en el 2018 si no hay una estructura diferente a la política comercial que tenemos hoy, los precios internos al productor van a comenzar a bajar”, advirtió Ybarra.
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Aunque Espinoza, que es también presidente de la Federación Centroamericana de Arroceros (Fecarroz) y vicepresidente de la Federación Latinoamericana de Arroz de Riego (FLAR), contempla la revisión del DR-Cafta, Ybarra considera que ante las actuales condiciones de la política exterior de Estados Unidos, no es el momento indicado para pedir una revisión, que además no sería fácil.
Estudian propuesta
El titular del Ministerio de Fomento, Industria y Comercio (Mific), Orlando Solórzano, dijo que el Gobierno “estudia” la propuesta del sector arrocero de crear un fondo de compensación que le permita a los productores enfrentar las pérdidas que les generará el ingreso de arroz con arancel cero procedente de Estados Unidos.
“Estamos estudiando, la llevamos al consenso de estudio mutuo y vamos a encontrar los mejores métodos y la mejor manera para salir del paso… porque hay una cosa muy importante que tiene de trasfondo esto y es la capacidad de los propios productores para mejorar sus rendimientos, mejorar la calidad y mejorar su productividad, porque en el trasfondo de todo eso está la capacidad tecnológica. Estamos estudiando las medidas que se pueden adoptar, pero el respaldo del Gobierno va a continuar”, sostuvo Solórzano.
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