14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.
El sorgo es uno de los rubros que se cultivan en las comarcas del sur de Chinandega con la participación de mujeres. LA PRENSA/S.MARTÍNEZ

El sorgo es uno de los rubros que se cultivan en las comarcas del sur de Chinandega con la participación de mujeres. LA PRENSA/S.MARTÍNEZ

Mujeres buscan cambio en sus vidas

La mujer chinandegana sabe ahora que organizada aporta a la economía del hogar y asume que ante el cambio climático tiene la oportunidad de proteger la tierra y sus recursos

María José Hernández es la secretaria de la Cooperativa Marcelino Méndez, en la comunidad La Bahiona, perteneciente al Delta del Estero Padre Ramos, El Viejo. Hasta el año 2013 permanecía en su vivienda como ama de casa para cumplir con los quehaceres del hogar, atender a sus dos niños y a su esposo, el pescador artesanal Darwin Méndez. Dudaron cuando les fue presentado el proyecto de cultivar peces pero al cabo de cuatro años reconocen que les cambió la vida.

Para entonces Hernández temía conducir un cayuco o bote de remo, pero ahora es experta en cruzar el estero con el canalete abriendo brecha, toma la cuerda para la búsqueda de los alevines que luego deposita en las jaulas flotantes. Junto a sus compañeras alimentan y protegen el producto dentro de esas jaulas hasta que en seis meses logren la talla correspondiente para la comercialización.

“Nos levantamos a las cinco (de la mañana) otras más temprano… hacemos doble jornada en la casa y fuera de la casa; nos sentimos bien porque así vamos aprendiendo nuevas cosas, nuevos trabajos… al principio no lo creían en la comunidad pero ahora lo ven bueno”, mencionó la humilde mujer.

También puede leer: Mujeres se abren espacio en la pesca

En esta cooperativa hay once mujeres y un varón que se encargan de cultivar el pargo lunarejo, cuya producción en su mayoría es comprada por salvadoreños. Producen cada siete meses y tienen instaladas cuatro jaulas con capacidad de cinco mil peces cada una. Se proponen ubicar dos más. La libra de pescado se vende entre 60 y 70 córdobas.

La mujer chinandegana sabe ahora que organizada aporta a la economía del hogar y asume que ante el cambio climático tiene la oportunidad de proteger la tierra y sus recursos.

Uno de los ejemplos de trabajo en grupo lo constituye la crianza de pargos lunarejos en jaulas flotantes que se desarrollan en tres comunidades de la costa noroeste del municipio El Viejo; en la comarca Aserradores, La Bahiona y Santa Julia-Potosí, frente al Golfo de Fonseca.

Otras labores y rubros con mujeres al frente son el sorgo, granos básicos, hortalizas y la semilla del marañón que destacan en los municipios de Chinandega, Somotillo y en Cosigüina, El Viejo.

Mujeres organizadas de Somotillo producen, acopian, limpian, procesan y empacan la semilla de marañón. LA PRENSA/S. MARTÍNEZ

Cruz del Carmen Díaz Salazar nació en la comunidad costera vecina del Tintal. Indicó que siempre ha laborado en la costa y recordó que pequeñita extraía conchas y pescaba con trasmallos.

Su esposo Fernando Tejeda es el padre de sus tres hijos y a él no le gustaba la idea de que se integrara a la cooperativa, pero luego entendió que el cultivo de peces era una interesante labor. Tejeda ahora le ayuda en la cosecha.

Lea además: Mujeres le hacen frente a la pesca

José Armando González Ojeda, de Amigos de la Tierra-España, informó que las mujeres son apoyadas técnica y financieramente en el marco de un proyecto que impulsa el desarrollo económico sostenible de familias en zonas rurales de Chinandega con Fundación Líder yen León es Ecodes a través de los fondos de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Aecid).

Productoras del campo

En el campo, tanto en la zona norte como al sur de Chinandega hay modelos de trabajos que avanzan. Mujeres que con gran esfuerzo buscan otras alternativas de desarrollo. En la Cooperativa Lucrecia Lindo, del municipio de Puerto Morazán, unas veinte mujeres se dedican a la camaronicultura. Victoria Antonia Vidaurre, directiva de la cooperativa, dice que la meta es vender directamente y exportar.

“Producimos pero comercializamos con intermediarios y la meta es negociar directamente porque sembramos con larvas que compramos a los laboratorios. Este año gestionamos el financiamiento para la cosecha porque este es un cultivo costoso y nos ha afectado la parte climatológica”, mencionó Vidaurre.

La Asociación Intercomunitaria para el Desarrollo Estratégico de la Península de Cosigüina, El Viejo, se ha conformado en su mayoría con mujeres para desarrollar siembras de granos básicos, procesar la semilla de marañón y como guías turísticos.

Puede leer: Impulsan día para la familia en El Viejo

Ahí el trabajo no se detiene. El proceso se ha establecido en mesones de concreto, con el uso de martillos para retirar la cáscara de marañón, pero las mujeres no descansarán hasta que adquieran equipos que le ayuden a mejorar el proceso de procesamiento del fruto.

Petrona Pérez, líder de estas mujeres, indicó que en total son 290 manzanas de árboles marañoneros los que trabajaron el año pasado.

También en Somotillo han logrado sobresalir. La señora María Salomé Padilla, de la comarca Santa Eulalia-Somotillo, ha dejado de un lado la timidez y hoy es la presidenta de la cooperativa en la planta procesadora de marañón.

Sostiene con ahínco que se han propuesto mantener activa la planta y el trabajo, acopiar la semilla de marañón, limpiarla y procesarla para venderla al mercado nacional y ya cuentan con experiencia de exportación al continente europeo.

Conchas negras

Se contabilizan ocho cooperativas de producción de conchas negras y pesca artesanal (cultivo de peces) en la costa noroeste de El Viejo, ubicadas en comunidades del Estero Delta Padre Ramos, entre estas Kilaka, Kilakita, El Tintal, La Bahiona, Poza La Boca, Punta Venecia, integradas por 150 familias, 75 por ciento socias mujeres que las instituciones les facilitan dos opciones: producción de conchas negras y pesca con capacidad de seis jaulas flotantes con la respectiva concesión manglar para conservar, cuidar y producir.

La producción de mariscos, semillas de marañón, granos básicos y otros rubros de mujeres en cooperativas se ha desarrollado con éxito en Chinandega. LA PRENSA/S.MARTÍNEZ

Fuera del Delta del Estero Padre Ramos se ubica en la comarca Santa Julia frente al Golfo de Fonseca, la cooperativa de mujeres productoras de conchas negras de El Rosario, que pronto tendrá la marca El Golfo y hay solicitudes para exportar a El Salvador.

Está integrada por unas veinte mujeres, producen la concha negra en viveros y luego la venden, a nivel local y a los salvadoreños.

Lea además: Producción de conchas para la sobrevivencia en El Viejo

Edwin Paniagua, de Fundación Líderes para el Desarrollo de la Región (Líder), indicó que mientras las mujeres se adaptan al nuevo contexto se va olvidando la pesca nociva con bomba de mecha lenta. “Esta es la opción a futuro, cada granja tiene un permiso ambiental que se otorga a través del Marena e Inpesca”, refirió.

También sorgo

Milagros Reyes es una líder juvenil, surgió como productora de sorgo en la comarca El Pellizco, de Chichigalpa, dijo que en cooperativas han trabajado y avanzado en tres años con la exitosa cadena de comercialización del sorgo.

Los proyectos de cultivo de sorgo en las comarcas El Pellizco, de Chichigalpa, San Benito y La Grecia, en Chinandega, les ha favorecido con enseñanza oportuna para administrar las cooperativas y capacitaciones para que mejoren la producción en las tierras fértiles frente al complejo volcánico Chonco-San Cristóbal. Entre las cooperativas con mujeres integradas sobresalen Los Maribios, Mujer Ejemplar y El Progreso.

La señora Herzonny Aguilar, de la comarca San Benito, es optimista, dice que han adoptado medidas ante el cambio climático como el uso de abonos orgánicos e insecticidas naturales para contrarrestar los fenómenos como El Niño o La Niña.

Lea más en: Sorgo está en peligro en Nicaragua

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí