Cerca de 30.000 personas fueron evacuadas para evitar los estragos del ciclón Debbie, que con sus vientos cercanos a los 263 kms/h, se convirtió en el fenómeno meteorológico más grave desde el paso del ciclón Yasi en 2011.
Las autoridades australianas señalaron que la región más afectada por los fuertes vientos fue el estado de Queensland, ubicado en el noroeste del país.
La primera ministra del estado de Queensland, Annastacia Palaszczuk, calificó a Debbie como una tormenta “monstruosa”.
Debbie, que bajó de categoría cuatro a dos después de tocar tierra este martes, dejó afectadas cerca de 10.000 viviendas en zonas aledañas a las principales ciudades de la región.