Esta semana tenía programado escribir sobre lo que denominamos el Modelo Cosep. Sin embargo, no sé si de manera coincidente o dirigida, la semana pasada se publicaron una entrevista de un comunicador nicaragüense en un periódico salvadoreño y posteriormente unas caricaturas en un par de medios escritos locales en donde se toca el papel del sector privado y del Cosep en lo particular, que me hicieron cambiar el editorial.
En la entrevista citada, al referirse a la relación entre el sector privado y el gobierno, el entrevistado dice que “hay una alianza, es un régimen corporativista y esto va en detrimento de los medios de comunicación independientes porque es una alianza a costa de transparencia y democracia”.
Más adelante en la misma entrevista se habla nuevamente del sector privado y vuelvo a citar “No es un modelo exportable, a pesar de que hay algunos voceros del sector privado nicaragüense que pretenden que sea adoptado en otros países alegando que este diálogo y esta comunicación que tienen con el gobierno facilita los negocios y las relaciones económicas, eso puede ser cierto, pero eso no puede ser a costa de democracia, de transparencia y a costa de la libertad.”
Posterior a esta entrevista, en donde también el entrevistado mencionó que la institucionalidad está demolida, el domingo se publicaron un par de caricaturas. En una de ellas aparece la bandera nacional en medio de las ruinas de la institucionalidad y me dibujan expresando el siguiente mensaje “Vamos a sugerirle al Comandante que contemple la posibilidad de que se amplíe el diálogo económico también a un DIÁLOGO POLÍTICO”.
Y una segunda caricatura en otro medio en donde ponen una serie de fotos y en una de ellas a mi persona con un funcionario del gobierno bajo el título ¡Los agarran infraganti!
Lo que yo percibo de todas estas publicaciones, y repito no sé si de manera coincidente o dirigida, es que se quiere vender a un sector privado anti democrático, corrupto, que no nos interesa ni la institucionalidad ni la libre prensa.
Puede ser que esté equivocado, por eso escribí lo que yo percibo, y si no es ese el mensaje pues me disculpan los que publican esto por no tener el mismo nivel de comprensión. Puede ser que se refieran a otro sector privado, no sé, pero de nuevo hasta donde mi nivel de comprensión me permite entender se refieren a Cosep pues aparecen una caricatura y una foto con mi persona y el nombre de la institución.
Sea así o no, esto me permite referirme en todo caso a lo que Cosep ha hecho en relación a los temas planteados.
Quisiera iniciar refiriéndome a lo que Cosep ha hecho en “detrimento de los medios de comunicación independientes”.
En primer lugar, dejar claro que somos creyentes del modelo de las libertades que planteamos en la primera Agenda Cosep 2009 pero que hemos venido impulsando desde tiempo atrás.
A lo largo de todos estos años hemos estado promoviendo y defendiendo la libertad de prensa. Lo hemos hecho de distintas formas.
Lo hemos hecho trabajando en la defensa de la libre prensa en las leyes que se han aprobado, asegurando la igualdad para competir de las empresas de telecomunicaciones, promoviendo la reversión de decretos administrativos que hubieran dejado en mano de las autoridades el nombramiento de los gerentes de las empresas de comunicación, o el manejo del internet y que publicar o no.
Lo hemos hecho estando a la par de las empresas de comunicación cuando han tenido problemas con las autoridades aduaneras y fiscales, apoyando a empresas en la obtención de permisos para introducir sus equipos de transmisión al país, en asegurar que ingrese el papel a tiempo para que el medio no deje de circular, en la devolución de equipos que han sido retenidos por las autoridades.
Lo hemos hecho apoyando a los medios de comunicación independientes como en el caso de las radios independientes a que trabajen asociadamente, sirviendo de mediadores entre los principales periódicos nacionales, desarrollando campañas en los medios de comunicación.
La última campaña “Por una Nicaragua Próspera y Democrática” fue inclusiva. No solo hay uno o dos medios independientes que defienden la libre prensa o se consideran únicos dueños de la verdad. En la campaña pautamos con seis programas de entrevistas, con radios de once departamentos, con empresas de cable de doce departamentos, con nueve medios impresos y cincuenta periodistas, entre otros.
El autor es presidente del Cosep.
