Cientos de rosas llevaron los devotos de Santa Rita de Casia a la misa solemne en honor a la patrona de la ciudad de Teustepe, que según el párroco Guillermo Blandón, es maestra de la humildad, la paciencia en el sufrimiento y la confianza en el Señor.
Hace 143 años que los teustepeños celebran a Santa Rita, desde que fue encontrada en el cerro de Cebadilla. Desde entonces, la pequeña imagen es conocida como la “patrona de las causas imposibles”.
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Algunos feligreses pasaron al púlpito a brindar testimonio de los milagros intercedidos por la santa. Por un momento, la Iglesia completa enmudeció para escuchar el relato de Daniela Marenco, quien con lujo de detalle explicó el milagro que le fue concedido.
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“A mis trece años apenas pesaba 39 libras, los médicos nunca me dijeron qué tenía. Un día un tío me llevó esperma de una vela que había puesto a Santa Rita en el cerro de Cebadilla, pidiéndole por mí, yo me puse la esperma en el estómago y me desmayé. Entonces, soñé que Santa Rita me llevó al cerro de Cebadilla y me dijo que participara de esa peregrinación”, dijo la joven. También le habría dicho que se iba a encontrar con una mujer que la iba a curar.
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Cuando Marenco fue llevada a esa peregrinación, se encontró con una persona que la ayudó a sanar. Ahora, la joven participa año con año de las procesiones vestida con el hábito de la santa.
La mañana de este lunes, la ciudad se encontraba abarrotada por feligreses que llegaron desde varias partes del país y del extranjero a pagar sus promesas a la patrona de Teustepe. Luego de la misa, presidida por monseñor Jorge Solórzano, la feligresía acompañó a la imagen en una procesión por toda la ciudad.
