Las autoridades de Panamá deportaron o expulsaron a 425 extranjeros entre enero y mayo pasados por haber incurrido en “faltas migratorias”, la mayoría de ellos ciudadanos de Colombia, Cuba, Venezuela, Nicaragua y China.
Estadísticas del Servicio Nacional de Migración (SNM) de Panamá difundidas este viernes dan cuenta de que en los primeros cinco meses del año 297 extranjeros fueron deportados y a 128 expulsados del país “de manera definitiva y permanente”.
Entre los deportados o expulsados están colombianos (131), cubanos (87), venezolanos (36), nicaragüenses (29), chinos (25), ecuatorianos (22) y dominicanos (22). También 11 mexicanos, 10 pakistaníes, 7 hondureños, 5 brasileños, 5 salvadoreños, 5 guatemaltecos, 4 peruanos, 3 estadounidenses, 3 jamaiquinos, 3 checos, 2 canadienses, 2 haitianos, 2 kosovares, entre otras nacionalidades, de acuerdo a la información oficial.
Entre las faltas migratorias alegadas por las autoridades están “ingreso al país de forma irregular (230); ser una amenaza para la seguridad colectiva (89); haber cumplido su pena de prisión en el Sistema Penitenciario panameño (46).
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También permanecer indocumentados (23); atentar contra la seguridad pública (17); incurrir en conductas que riñen con la moral (12) y trabajar sin la visa correspondiente (8).
Nicaragüenses también encabezan retorno voluntario
El SNM precisó además que el retorno voluntario a su país lo encabezaron los nicaragüenses (475), seguidos de colombianos (209), venezolanos (149), dominicanos (66), hondureños (25), cubanos (21), chinos (19) y salvadoreños (16).
El pasado 31 de mayo entró en vigor un decreto panameño que redujo de 180 a 90 días la estadía en Panamá a turistas de Colombia, Venezuela y Nicaragua, una medida que busca desalentar la permanencia ilegal de esas ciudadanos en el país centroamericano, según las autoridades.
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El decreto fue demandado por inconstitucional ante el Supremo de Panamá el pasado 5 de junio por el abogado Gilberto Cruz, que argumentó que es discriminatorio y debió aplicarse a todas las nacionalidades.
El decreto oficial indica que la reducción del tiempo de estadía de los ciudadanos de Colombia, Venezuela y Nicaragua se adopta considerando “la gran cantidad de extranjeros que, luego de ingresar como turistas, realizan actividades distintas” a ese estatus “sin solicitar el cambio de categoría migratoria”.
Por su pujanza económica y estabilidad sociopolítica, Panamá ha sido en los últimos años uno de los destinos más elegidos por muchos migrantes de la región, principalmente venezolanos, colombianos y centroamericanos.
También han llegado a Panamá nacionales de otros 51 “países amigos”, entre ellos americanos y europeos, amparados en un decreto ejecutivo de 2013 no recíproco que les conceden ventajas migratorias y para la obtención de visados de trabajo.