No hubo necesidad que la Fiscalía presentara las pruebas contra el acusado Julio César Nicolás Sánchez, de 41 años, debido a que este admitió ante una juez que privó de la vida de dos tubazos a su hermano Oliver Roberto Nicolás Sánchez, de 40.
Mientras Julio César admitía los hechos, su madre Mirna Sánchez, muy conmovida por la tragedia, lloraba en la sala donde se desarrollaba la audiencia en los Juzgados de Managua.
Una vez que Julio admitió los hechos, la juez Décimo Distrito Penal de Audiencia, Damaris Vanegas, lo declaró culpable del delito de parricidio.
Debate de pena
En debate de la pena la Fiscalía pidió 23 años de cárcel para Julio César, alegando que este al privar de la vida a su hermano Oliver actuó con ensañamiento, porque dos veces golpeó con un tubo a la víctima.
Por su parte, la abogada defensora de Julio César, solicitó a la juez Vanegas que no le impusiera prisión a su representado, debido a que ya pagó su condena por el fuerte dolor que siente por haber privado de la vida a su hermano Oliver.
Lea aquí las historias de los parricidios que han estremecido Nicaragua
La defensa, que a ratos leía un documento tipo carta en la sala de audiencia, dijo que el acusado Julio César también ya fue condenado por la sociedad y que incluso la madre de ambos; no puede ni ir a la pulpería porque hasta “chifletas” le tiran.
Expresó que le han informado que Julio César no quiere ni comer en la cárcel donde está recluido.
La tragedia
A Julio César, la Fiscalía lo acusó de privar de la vida a su hermano Oliver de dos tubazos: uno en la mejilla izquierda y otro en la cabeza.
La tragedia ocurrió el pasado 2 de julio a las 2:00 de la madrugada en el barrio Óscar Turcios, Managua.
La víctima Oliver descansaba en su casa, mientras que el acusado Julio, que habita en la misma vivienda con su pareja, discutía con esta.
Lea también: Remiten a juicio al hombre acusado de matar a su amigo de 30 machetazos
La víctima Oliver le dijo a su hermano que no estuviese maltratando a la pareja, por lo que el acusado se enojó y se fue al carro, sacó un tubo metálico y entró a la casa, donde la víctima trató de defenderse con un machete, pero el procesadole propinó dos tubazos.
Oliver fue llevado en un carro al hospital por su propio hermano, pero llegó fallecido.
