“El poder en este país ha hecho los espacios pequeños para mucha gente y en un momento sentí que no tenía espacio y es así que mucha gente busca salida, espacios”, dice el escritor Francisco Larios, autor del nuevo poemario Sobre la vida breve de cualquier paraíso.
Caso extremo pero no único
“De alguna manera, aquí ha habido asfixia política, ideológica; ha sido un caso extremo pero no es único”, señala Larios, quien en los años ochenta emigró a Estados Unidos en busca de mejores oportunidades profesionales.
Larios es autor de varios libros de poesía bilingüe y de la antología Los hijos de Whitman-Poesía norteamericana del siglo XXI, obra magna que reúne a 109 poetas del mundo que residen en Estados Unidos.
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Sobre su nuevo libro Sobre la vida breve de cualquier paraíso, el poeta dice que sus poemas aluden a las “ilusiones de paraísos temporales acontecidos en Nicaragua y en otros países y que se han convertido en otra cosa”.
Este al final resulta en una falsedad del poder autoritario, social o de parejas de seres humanos que lo idealizan.
El poder visto desde la poesía
“A un agrio ostracismo condenado, / logré esconder,/viendo de reojo el paraíso, /mi sonrisa de venganza eventual,/ y noté /que un óxido rastrero devoraba / el hacha del verdugo. lee el poeta estos versos de la sección Ciclos, que pone al desnudo una de las oscuras ventanas del poder.
Para Larios, el poder en todos lados del mundo se manifiesta opresivo y llega hasta donde se le permite y oprime hasta donde lo dejan.
“Esta manifestación es propia de la naturaleza humana”, sostiene Larios, y como tal puede ser cambiada.
Su nuevo poemario realiza un recorrido sobre el poder y sus consecuencias, al final hay un capítulo titulado Exilios, que habla de las “víctimas del poder fuera de su lugar”, refiere el bardo.
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Sobre su lenguaje poético Larios comenta que este pone distancia de los textos de agitación o militante como los realizados por Roque Daltón o Leonel Rugama, pero no olvida su sentir contestatario.
En este sentir crítico y lírico Larios no solo cuestiona las manifestaciones de los gobiernos autoritarios o aparentemente “democráticos” o “revolucionarios”, sino que va más allá porque explora el origen de la naturaleza humana, como el iniciado en la relación entre dos personas con todas sus falsedades.
Versos al amor y familia
Aclara que no es miembro de ningún partido, pero le gusta hacer valer su derecho de protestar como ciudadano libre ante todas “las películas del poder que se repiten una y otra vez en nuestros países”.
El amor, la esperanza, Dios, la familia, el sentimiento del exilio también están presentes en otros de sus versos.
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“El poder que crea ilusiones de paraísos, que resultan falsedades e injusticias, es de lo que trata el libro”, reitera el escritor, autor de otros libros: The net in side (La red ante los ojos, 2015), La isla de Whitman (2013), la plaquette Astronomy of a dream (Astronomía de un sueño, 2013), y Cada sol repetido (2010).
De padre a hijo en un país extranjero
Para Fran, mi hijo
Atávico el amor, te entrego tus raíces,
en pena profunda desterradas;
en medio del azar irremediable
tu propia cuna imaginada extraña.
En la llanura calma construida de escapes
rumores de tormentas buscaran abrazarte,
cantando las historias y las pausas
de mi voz cansada.
Y a serás polen, nube, semilla o roca venerada
(el último designio es inescrutable).
Y serás el camino de mi vejez, y serás las alas
que aquí celebro y lamento como solo es posible:
por la gloria insondable de vivir.
(De la sección Exilios del libro Sobre la vida breve de cualquier paraíso, de Francisco Larios)