Doña Petrona —una anciana de pies descalzos gruesos y agrietados, luciendo su delantal y vestido largo, sin faltar su manojo de leña que todos los días llevaba a Ocotal— quedará eternizada en dos pinturas.
La señora caminaba casi ocho kilómetros desde Yaraje, su comunidad, para llegar a Ocotal. “No es una simple pintura”, dijo su autor Óscar Zamora Cárdenas, quien se inspiró un día cuando sentado en la acera de su casa, miró a la anciana bajando de su comunidad con un manojo de leña a la altura de su cintura.
“Ella era una mujer campesina de 96 años que recorría a diario bajo sol y agua, descalza, cargada de leña o cualquier otra cosita para vender en Ocotal. Muchas veces con hambre y cansada. En ocasiones no lograba vender nada y por las casas de mi barrio pasaba pidiendo ropa o comida a cambio de su manojo de leña”, recordó el joven artista.
Lea además: Conozca las obras de veintiún pintores nicaragüenses
La visitó varias veces en su casa, donde doña Petrona vivió con su hermana entre paredes de adobe y piso de tierra, pero además en extrema pobreza. La realidad motivó más la inspiración del joven pintor, cuando se enteró que la señora no llegaría más a Ocotal porque tenía cáncer.
Perfeccionó detalles
Aceleró la pintura, con el propósito de que un buen porcentaje de la venta del cuadro fuera para doña Petrona. Lo vendió en 600 dólares y le llevó a la anciana medicamentos y un poco de comida para la familia.
Nuevamente Óscar dibujó a doña Petrona, esta vez perfeccionando detalles que logró aprender en la Escuela Lienzos y Pinturas de Ocotal. Esta, entre otras 30 pinturas de los alumnos de la Escuela, estarán expuestas y a la venta el 11, 12 y 13 de agosto en el Club Social de Ocotal.
Puede interesarle: Descubra la gráfica de Rufino Tamayo y sus mundos ocultos y mágicos
Su propósito era que los recursos obtenidos de la venta, nuevamente fueran para la señora, pero doña Petrona falleció este domingo.