Del otro lado del teléfono, el boxeador Walter Castillo dice, desde Miami, Estados Unidos: “Esta es la pelea más importante de mi vida”.
Su frase parece una declaración definitiva, una sentencia irrevocable, aparte de esto, su rival Devon Alexander, con récord de 26 peleas ganadas y cuatro perdidas, y con nombres como Amir Khan, Jesús Soto Karas, Shaw Porter, Lucas Matthysse y Marcos “El Chino” Maidana en su trayecto, le dan toda la razón: el combate no será fácil.
Relacionado: Walter Castillo fue frenado por Sergey Lipinets
Sus palabras adquieren todavía más sentido cuando después de un año de no ser tomado en cuenta por el promotor Al Haymon, conocido por trabajar con Floyd Mayweather Jr., Castillo está recibiendo una oportunidad valiosa, que no debe desaprovechar: “Estoy trabajando seriamente, con disciplina, esa noche no quiero que me traicionen mis pulmones, para no fallarme a mí mismo ni a mi familia ni a Nicaragua”, comenta.
Aunque no ha sido anunciado de forma oficial, tampoco en el sitio Box Rec, Castillo y Devon Alexander se enfrentarán el 3 de octubre en un peso de 147 libras, tonelaje que asegura el nicaragüense no le cuesta dar en la báscula. Hasta ya firmó el contrato para el combate.
Entrevista: Walter Castillo: “Caí en el alcoholismo”
“Quiero salir de las cenizas. Vengo de perder con el ruso Sergey Lipinets por falta de aire, me quedé sin piernas, las condiciones solo las andaba de la cintura para arriba y así es mentira, así no se gana. Pero esta vez las cosas serán diferentes”, apunta.
“La promesa es que el ganador tendrá la oportunidad de un combate eliminatorio, eso es bueno. Me propuse dejar atrás mi pasado de indisciplina”, dice, motivado.