En medio de gritos, pancartas, pitoretas, globos de colores, besos y abrazos fueron recibidos anoche los niños de la Selección Nacional de Beisbol Sub-10, que se coronaron bicampeones del Campeonato Panamericano de Reynosa, en México.
Los niños arribaron orgullosos luciendo la medalla de oro en su pecho, en medio de muchos aplausos , no solo de sus padres sino de las autoridades de la Federación Nicaragüense de Beisbol Asociada (Feniba), que dirige Nemesio Porras.
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Centeno emocionado
En las manitos del niño Wilfredo Centeno no cabían los cinco trofeos conseguidos en dicho torneo. “Yo quería traer la medalla de oro para Nicaragua y desde la semifinal le dije a doña Angélica Ramírez (mánager) que íbamos a llegar a la final”, dijo el niño Centeno.
“Estoy sorprendida porque mi hijo ha podido desarrollar el talento que Dios le dio. Imaginé que quizás traería un premio, pero no tantos. Es un orgullo para mí”, relató emocionada Saba Mendoza, mamá del niño Centeno.
En tanto Porras manifestó que “nos sentimos orgullosos que a esta corta edad estos niños sean bicampeones panamericanos, agradecemos a sus padres y al Gobierno central por el apoyo. Todos en Copabe han mandado felicitaciones por la manera en que se está desarrollando el beisbol en Nicaragua”.
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El trabajo de la entrenadora Angélica Ramírez fue exaltado por Porras ya que se convirtió en la primera mujer en ganar una competición como mánager a nivel internacional.
Otro de los niños que traía un hermoso trofeo fue Nelson López, nombrado el parador en corto del equipo Todos Estrellas.
“Agradezco a la Alcaldía de Palacagüina porque me apoyó, quiero llegar a Grandes Ligas”, dijo con su sonrisa López, un niño que además del beisbol tiene pasión por el baile.
