El poeta trapense Ernesto Cardenal dedicó el Premio Internacional Mario Benedetti 2018 — galardón que reconoce su lucha por los derechos humanos y la solidaridad — al pueblo de Nicaragua que ha levantado su voz contra la dictadura Ortega-Murillo, y al niño mártir Alvarito Conrado, asesinado por un francotirador a inicio de las protestas en abril de este año.
El poeta de 94 años, no pudo estar presente en la ceremonia solemne de entrega, pero envió sus palabras de agradecimiento en un vídeo que fue subido en el sitio de la Fundación Mario Benedetti.
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En la ceremonia, informa la Fundación en su sitio, asistieron la ministra de Educación y Cultura, María Julia Muñoz, y dos ex premiadas: Belela Herrera y Mariana Motta.
El no poder estar presente , explicó por su lado el bardo, fue debido a su edad avanzada, pero que le hubiese gustado asistir a su querido país de Uruguay, cuna de su amigo Mario Benedetti.
Razón por la cual envió un video con sus palabras de aceptación del Premio, el cual le fue otorgado recientemente.
Cardenal destacó su gran amistad con Benedetti (1920-2009), poeta de la llamada Generación del 45, quien vivió exilio y es autor de más de ochenta libros.
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Reconoció que él fue quien lo inició en la “revolución”, porque fue un rebelde en su tiempo y un revolucionario.
“Él fue el que me introdujo en la revolución, fue el primero que me abrió las puertas de la revolución, el primero por el cual yo empecé a ser un rebelde que había sido siempre por vocación” (…), y “fue inmensamente célebre en América Latina”, destacó Cardenal, la memoria de Benedetti.
Nicaragua “ahora está teniendo una nueva revolución”
“Agradezco pues también que se me haya dado este premio que no es para mí, es para el pueblo de Nicaragua el Premio Mario Benedetti”, dijo el poeta.
Asimismo resaltó que Nicaragua “ahora está teniendo una nueva revolución, después de la primera muy bella que tuvimos que fue una revolución armada. ahora hay una revolución muy original desarmada, pacífica, cívica, algo nuevo para nosotros y el mundo”, resaltó el poeta, quien fue militante del FSLN, pero ahora es un crítico del régimen orteguista.
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Y para recibirlo envió en su nombre a Lizeth Dávila, madre de Alvarito Conrado, un niño de 15 años, héroe y mártir asesinado por un francotirador “mandado por el régimen que actualmente tenemos, que es un régimen criminal, asesino”, refirió el poeta.
Asimismo denunció que el niño herido no fue atendido en el hospital porque “había orden de las víctimas de este régimen en los hospitales (…) por lo cual Alvarito murió, de manera que fue asesinado”. Su delito -añadió el poeta -, fue “haber estado llevando agua a los que estaban en rebelión pacífica”.
Por lo que también es merecedor del Premio Mario Benedetti”, dijo el poeta quien al final del video mandó su saludo al su “querido pueblo de Uruguay”.
El premio
La Fundación Benedetti ha concedido este galardón honorífico desde hace cinco años. En ediciones anteriores fue entregado al activista Leonard Peltier (2013), la ex jueza uruguaya Mariana Motta (2014), y al teólogo brasileño Leonardo Boff (2017), entre otros.
Esta la segunda vez que el poeta no asiste a recibir a recibir honores. Recientemente fue homenajeado en la edición 32 de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara en México, y no estuvo presente.
En años anteriores, Cardenal ha sido reconocido con el Premio Reina Sofía de Poesía Iberoamericana 2012, elPremio Iberoamericano de Poesía Pablo Neruda en 2009, y en 2010 fue propuesto al Premio Nobel de Literatura por la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE).