Luis Sánchez [email protected]
A juzgar por los cien millones de dólares de la guaca de corrupción del gobierno anterior que el Gobierno puso al descubierto el miércoles de esta semana, el ex presidente Arnoldo Alemán “hizo su agosto” cuando ejerció el máximo poder del gobierno y el Estado, entre 1997 y 2002.
“Hacer su agosto” significa obtener buenas ganancias de manera lícita (por ejemplo, en la sección de Negocios y Economía de LA PRENSA de ayer se tituló: “Comercio formal espera hacer su agosto”). Pero se dice igual de alguien que se lucra en forma ilegal, pues, como señaló en la página de Opinión de LA PRENSA —también de ayer— el director de la Academia Nicaragüense de la Lengua, doctor Jorge Eduardo Arellano: “la frase verbal ‘hacer uno su guaca’ tiene su correspondencia en ‘hacer su agosto’, es decir: robar”
Esta popular expresión se debe a que el mes de agosto coincide con la cosecha agrícola, y aunque los antiguos romanos le pusieron este nombre en honor del emperador divinizado Augusto César, era el mes consagrado a Ceres, la diosa de la agricultura.
Es que casi todos los meses del calendario tienen nombres que les pusieron los antiguos romanos, relacionados con sus creencias, costumbres y mitos, igual que los nombres de los días.
Enero, por ejemplo, viene de januarius, que significa puerta. Fue dedicado a Jano, el dios que inventó las puertas y guardaba las llaves. Además, tenía dos caras con las que miraba simultáneamente al pasado y al futuro.
A marzo lo llamaron así por Marte, dios de la guerra, aunque era consagrado a Minerva y lo representaban con la figura de un campesino podando una viña.
Abril, del latín aperire, abrir, porque en el antiguo calendario romano era el primer mes del año, aunque también se dice que se le dio ese nombre por una deidad llamada Aprili. Fue consagrado a Venus, diosa del amor, y como es el comienzo de la primavera lo representaban con una hermosa figura femenina llevando unas ramas recién florecidas.
Mayo fue llamado así por Maya, una de las Pléyades, hija de Atlas y Pleyonea, y a quien, para que escapara de Orión, Júpiter la convirtió en estrella, junto con sus hermanas.
Junio viene de Juno, diosa del matrimonio y la maternidad. Julio es por Julio César, creador del calendario romano. Agosto, ya lo dije. Septiembre no tiene origen romano, sino que se deriva de siete, porque corresponde al séptimo signo del Zodíaco, que es Libra. Igualmente octubre debe su nombre a que es el mes del octavo signo zodiacal, Escorpión. Noviembre porque es el mes del noveno signo del Zodíaco, o sea, Sagitario. Y diciembre debe su nombre a que era el décimo mes del antiguo calendario romano.
Dejé febrero por último, deliberadamente, porque su nombre se deriva de februari, como llamaban los romanos al sacrificio de la expiación que practicaban en este mes para pagar por lo malo que habían hecho durante el año.
O sea que quien hacía su agosto inevitablemente debía pagar su febrero (o, como se dice en nicaragüense: a todo… le llega su sábado). Y al parecer ésta es la situación del ex presidente Arnoldo Alemán, a quien al parecer le está llegando el momento de expiar los males de las guacas de la corrupción, es decir, que debe pagar su febrero aunque estemos en agosto.