Henry Espinoza Nicaragua
La palabra “cacique” es originaria del taíno, idioma del grupo indígena que habitaba en varias islas del Caribe a la llegada de los españoles, y significa básicamente jefe. Fue el término español que se utilizó para designar a todos los jefes, reyes o emperadores de las tribus o sociedades pre hispánicas de Centro y Sudamérica.
Cuando uno dice racismo o racista frecuentemente esta palabra encierra la eficacia de nuestro racismo hispano. Digo eficaz porque incorpora a nuestro idioma un concepto cargado de injuria, el cual es fácil mantener en el sistema de discriminación porque ni siquiera es percibido como tal.
Las palabras cacique y caciquismo podrían corresponder como paralelos históricos y geográficos, casi exactamente con rey y monarquía o señor feudal y feudalismo. Podemos asumir, y lo comprueba la historia, que tanto en Europa como de este lado del Atlántico hubo reyes europeos buenos y caciques americanos buenos, de ambos lados también los hubo malos, mediocres, corruptos, perversos y de toda suerte. Sin embargo notemos la diferencia que se hace al usar estos vocablos: “hubo reyes que actuaron como verdaderos caciques, déspotas, autoritarios, etc.”, y también “hubo caciques que actuaron como verdaderos reyes, sapientes, soberanos” (Editorial, LA PRENSA, 7 de junio del 2004). Este ejemplo ilustra el uso peyorativo de la palabra cacique/caciquismo, aunque semánticamente es correcto.
Desafortunadamente no tenemos ningún problema en hacer esas afirmaciones porque estamos empleando correctamente el idioma. Claro, el mismo diccionario de la Real Academia Española lo confirma. Afortunadamente, el idioma español tiene suficientes recursos lingüísticos para describir adecuadamente a políticos como corruptos, antidemocráticos, mentirosos, etc. Podríamos pensar además en usos más complejos y completos de los términos rey y cacique, aclarando los aspectos positivos y negativos de ambos. Por ejemplo: individuos con poder absoluto y vitalicio, individuos designados al poder por orden hereditario. De forma similar monarquía y caciquismo fueron formas o sistemas de gobierno no democráticos.
Médico nicaragüense residente en Washington.