CAROL MUNGUIA – Corresponsal CHINANDEGA.— Un equipo de ginecólogos y pediatras atendió el parto por cesárea de una mujer campesina, originaria de El Viejo, que trajo al mundo a eso de las 10 y 45 minutos de la mañana de ayer a tres varoncitos, que nacieron con un minuto de diferencia cada uno y se encuentran en condición estable. El doctor Leonel Juárez Meza, Director del Hospital Materno Infantil “Mauricio Abdalah”, dijo que después de mantenerse 36 días hospitalizada por amenazas de aborto y complicaciones del embarazo múltiple, se decidió intervenirla. “El equipo de médicos especialistas luchó por llevarla después de las 36 semanas para evitar riesgos en los recién nacidos, pero se adelantó el trabajo de parto”, indicó.
El peso promedio de los niños es de un poco más de cuatro libras y mientras dos se encuentran en la sala de intermedios, un tercero está en la sala de cuidados intensivos por ser el de menor peso, aseguró. El Centro Asistencial atiende un promedio de 450 partos mensuales y éste es el séptimo parto de trillizos en los últimos 10 años y el primero de este milenio. Francisca Petronila Flores Calero, madre de los trillizos, que laboraba por contrato como cocinera en el Ingenio Monterrosa, se enfrenta ahora a una triple responsabilidad, pues asegura que no tiene un oficio para mantener a los nuevos miembros de su familia. El Ministerio de la Familia, a través de su delegada María Idis de Montealegre, entregó ayuda para la madre, quien todavía ayer por la noche se recuperaba de la operación aunque aún convaleciente pedía ver a sus vástagos. El doctor Juárez, lamentó que en Nicaragua no pueda brindarse ayuda a las madres como Flores y comentó que en países como Costa Rica y México donde ejerció como ginecólogo, el Seguro Social cubría la educación y alimentación de partos múltiples, como el ocurrido en el centro hospitalario. Hasta un poco más del mediodía, ningún familiar se había enterado que Francisca dio a luz. Su hija Anayanci Castro, de 14 años, llegó a visitarla un poco después de salir de clases y se encontró con la sorpresa. “Voy a ayudar a mi mamá a criar a mis hermanos, no sé cómo le vamos a hacer, pero ellos van a vivir”, dijo la menor quien afirmó que pasadas las cuatro de la tarde tendría que abordar el último bus para cuidar a sus hermanos de 10 y ocho años de edad, que se encuentran en una comarca de El Viejo. Médicos y personal de enfermería solicitaban a los medios que dieron cobertura al parto que realizaran una campaña de sensibilidad con la madre, a quien le hace falta de todo para criar a sus niños |
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Nacen trillizos en Chinandega
El peso promedio de los niños es de un poco más de cuatro libras cada uno; dos de ellos se encuentran en la sala de cuidados intermedios y el otro en la sala de cuidados intensivos por ser el de menor peso. CAROL MUNGUIA – Corresponsal CHINANDEGA.— Un equipo de ginecólogos y pediatras atendió […]
