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LEON.– La dirección de Planificación Física y Desarrollo Local de la Alcaldía de León resolvió demoler el área construida del muro y de enverjado en el atrio de la Iglesia El Calvario valorado en 120,000 córdobas. El lugar fue declarado Patrimonio Histórico.
La Alcaldía asumirá los gastos invertidos por la feligresía en el muro a demolerse y que tiene 68.36 metros de pared y 85.45 metros lineales de verja metálica.
La construcción de un muro enverjado alrededor del templo El Calvario la decidió el Presbítero Abelardo Toval, párroco del templo, sin solicitar permiso a la Oficina del Centro Histórico de la municipalidad de León.
Ello ha provocado notificaciones al párroco, en la que se ha ordenado reiteradamente suspender la obra por no armonizar con el conjunto arquitectónico del templo.
A juicio de la delegada de Patrimonio Cultural, Marlene Landero Pérez, el muro no cumple con los requisitos técnicos de cimentación, resistencia y calidad.
Además es considerado antiestético y no está acorde con el conjunto colonial del templo católico.
El padre Toval, en carta dirigida al alcalde, Dr. Rigoberto Sampson, dice ser objeto de hostigamiento y amenazas de destrucción de la obra que persigue proteger el atrio que se ha convertido en letrina pública y escenario de actos reñidos con la moral y los principios cristianos.
El Vicario de la Diócesis de León, Monseñor Benito Pentzke Torres, a través de una constancia que el Padre Toval hizo llegar a la Alcaldía, señala que el cura está autorizado para levantar el muro y verja de hierro alrededor del templo.
Recuerda que éste pertenece a la Iglesia Católica, según consta en el Libro de Propiedades Inmuebles del Registro de León, Tomo VI Número, 412, Folios 110 y 111.
“El hecho que posteriormente haya sido declarado Patrimonio Nacional, no anula los derechos de propiedad de la Iglesia”, expresa la constancia de la Vicaría.
Las valoraciones técnicas indican que el muro crearía inundaciones por las pendientes existentes, ya que “no tiene por dónde drenar el agua pluvial.
Por su altura queda expuesto a un derrumbe, ya sea por la presión del agua acumulada o por un movimiento telúrico, constituye un peligro para los transeúntes del sector”, dice entre otras cosas la resolución de la Alcaldía de León.
En una posterior reunión se le encontrará solución al problema, el encuentro se programó para el viernes próximo entre el Alcalde Rigoberto Sampson, el Padre Benito Pentzke Torres, y el Padre Abelardo Toval quien además contratará a un arquitecto para que haga las valoraciones técnicas sobre el muro.