MARÍA ANTONIA LÓPEZ M. [email protected]
MATAGALPA.— La ausencia de lluvias en los municipios secos de este departamento tiene afligidos a los agricultores, porque cada día disminuyen las reservas de agua de las fuentes naturales.
Tras perder los cultivos de granos básicos, los productores de Ciudad Darío, Terrabona y San Dionisio temen no poder hacer otras actividades debido a la escasez de agua en la zona.
El alcalde de Darío, Mario Quijano Narváez, manifestó que del 80 al 90 por ciento de la producción de maíz y frijol en la época de primera se perdió por falta de lluvias y para colmo entrará pronto el período de canícula, que es la ausencia de lluvias por quince días.
En tiempos normales, Darío ha logrado cultivar 2,500 quintales de frijoles y hasta 4,000 quintales de maíz, pero la crisis ha obligado a la gente a buscar como alternativa el comercio informal, denominado “liniero” (vendedor ambulante), con lo cual logran pasar los días.
A juicio de Quijano, algunos organismos no gubernamentales pueden ayudar a solucionar el problema si facilitan a los campesinos vacas, gallinas o cerdos.
“Vivo en las mejores zonas productoras de Darío y estamos perdiendo la siembra, no ha llovido y en las comunidades cercanas están peores que nosotros, muchas matas florecieron y van a esperar a secarse, sólo nos queda sembrar de postrera para ver si en agosto o septiembre logramos algo”, manifestó Juan Alarcón de la comunidad El Pital, Darío.
Vicente Masís, de San Andrés de Terrabona, manifestó que el agua de la quebrada está escaseando y no le da para regar las dos manzanas y media que sembró de maíz. Sólo tiene agua por cuatro horas y optó por cubrir media manzana para tener alimentos, si le resulta esa cosecha.
“Solamente espero cosechar ocho quintales de maíz, para mi familia que es de siete. Con eso nos da para comer cinco meses y ver si puedo guardar para la otra cosecha”, afirmó.