- La actividad comenzó el lunes 24 de julio a las seis de la tarde
- Hasta la tarde del 25 se reportaba la llegada de más de 400
tortugas; pero a la medianoche todavía seguían llegando - Esperan que nazcan millón y medio de tortuguillos
NOELIA SANCHEZ R. – [email protected]
RIVAS— Más de 400 tortugas habían llegado a anidar entre la noche del 24 de julio y la tarde del 25 al refugio de vida silvestre La Flor, iniciando el espectáculo que año con año ofrecen los quelonios a los visitantes que realizan la travesía de viajar en un camino accidentado para vivir esa fascinante experiencia.
Entre los meses de julio y diciembre a este lugar llega una gran cantidad de tortugas de la especie “paslama” a desovar; aunque cabe destacar que las “anidaciones” se producen todo el año pero en menor cantidad (anidaciones solitarias).
El responsable de áreas protegidas del Departamento de Rivas, Ramón Duarte, dijo que desde las seis de la tarde del día 24 hasta las seis de la mañana del 25 habían contabilizado unas 403 tortugas; hasta las 3:14 de la tarde de ese mismo día anidaron entre 30 y 32 más.
No obstante, a eso de la medianoche del 25 se podían observar algunas tortugas que apenas hacían el hoyo o casa (así se le denomina al lugar donde colocan los huevos) en donde depositarían sus huevos.
Tanto el Ministerio de Recursos Naturales como la Fundación Cocibolca (que tienen presencia en esta zona) se han propuesto como meta “alcanzar el millón y medio de tortuguillos”; por ello se ha suspendido el permiso para que casi 598 familias tomaran para su consumo o venta cierta cantidad de huevos.
Unas ocho comunidades de esta zona se beneficiaban con cuotas de huevos de paslama para autoconsumo.
Pero también para nadie es desconocido que muchas personas los comercializaban ilegalmente, principalmente en el centro de la ciudad de Rivas.
Se ha tomado esta medida porque se pretende subir el número de “eclosión” o nacimiento de tortuguillos, puesto que la cantidad de anidación ha disminuido en los últimos años.
Mientras se llega a esta cantidad de nacimientos, sólo se darán huevos en el caso de que los nidos estén en la zona baja de la costa y en las casas (nidos) autodestruidas, mencionó Luis Alberto Canda, responsable de áreas de la Fundación Cocibolca.
Agregó que después de cubrir esta meta se dará un mayor aprovechamiento “rotativo” de huevos para las comunidades y se destinarán sólo para autoconsumo, no para comercializar.
De acuerdo con las estadísticas, el año pasado en este refugio se produjeron unas 47 mil anidaciones y es posible que una misma tortuga venga entre tres o cuatro veces a anidar en este mismo lugar.
Este dato es posible conocerlo porque a medida que las tortugas van arribando, una a una son marcadas con pintura en sus escudos dorsales que se ubican en lo que conocemos como caparazón; al año siguiente, si la misma tortuga vuelve a llegar se le marca el segundo escudo y así sucesivamente mientras lo sigan haciendo (llegando).
En este refugio de vida silvestre hay presencia del Ejército, que se encarga de reguardar la zona las 24 horas del día, previendo que las personas lleguen a saquear las casas de las tortugas.
COMO ES LA TRAVESIA DE LAS TORTUGAS
La actividad de estas tortugas comienza cuando salen del mar. Se estima que transcurren entre 45 minutos o una hora desde que salen de su hábitat natural hasta que regresan a éste nuevamente.
Salen del mar, recorren unos cuantos metros y se posan sobre el lugar en donde construirán su casa.
Con la lentitud que las caracteriza, sacan arena para construir un hueco de aproximadamente unos 15 centímetros; sus patas traseras son utilizadas como palas para realizar esta acción.
Cuando la casa está preparada, la tortuga comienza su labor de desove; se estima que cada tortuga desova entre 80 y 120 unidades de huevos.
Los nacimientos se producen entre los 45 y 52 días después de que los huevos son colocados en sus casas; pero irremediablemente a causa de los depredadores externos sólo sobrevivirá el 1% de tortuguillos, lo que significa que de cada 100 de éstos sólo uno podrá ganar la batalla.
Cuando la tortuga ha depositado todos sus huevos, comienza a realizar la tarea de cerrar la “casa”; entonces inicia una serie de movimientos que finalmente concluyen con el cierre de los huecos.
Es posible que, sin necesidad de mucha luz, se pueda saber cuál es el momento exacto en el que las tortugas realizan su última tarea (cerrar la casa), antes de regresar al mar; gracias al silencio de la noche se pueden escuchar golpes fuertes que indican este proceder.
UNA EXPERIENCIA INOLVIDABLE
A eso de las doce de la medianoche del 25 todavía quedaban tortugas que apenas habían arribado a este refugio, pues estaban realizando la casa donde desovarían.
Indudablemente que el espectáculo es mejor de noche; aunque si desea vivir esa experiencia tendrá que ir debidamente preparado. Por lo menos deberá cargar con su suéter por el frío de la madrugada, quizás un poco de comida y sobre todo deberá olvidarse de dormir, puesto que durante toda la madrugada las tortugas no paran de llegar.
Y lo más importante es que no debe perderse ni una sola de las actividades de estas tortugas; desde cómo hacen su casa, hasta la forma en que la cierran.
UBICACIÓN
Si partimos de la ciudad de Rivas hay por lo menos unos 49 kilómetros aproximadamente, para llegar al refugio. Este lugar que pertenece a San Juan del Sur queda ubicado en la parte sur-oeste sobre la carretera, poco antes de llegar a este puerto.
El área total de la costa de este refugio es de aproximadamente 1,575 metros.
ALGUNOS DATOS ESTADISTICOS DE NACIMIENTOS DE TORTUGUILLOS
A partir del año 1993 se comenzaron a llevar datos estadísticos que permiten conocer un estimado de los tortuguillos que nacen durante la temporada y la cantidad de tortugas que visitan el área, entre otros datos.
– En 1993 nacieron 845,784 tortuguillos.
– El año siguiente 1,911.030
– Para 1995 la cifra aumentó a 2,171.520
– Luego en 1996 se registran 1,321.753 nacimientos
– En el 97 la cifra disminuyó notablemente a 366,740
– Finalmente en el año de 1999 nacieron 23,316 tortuguillos.