- Aún no cuentan con suficiente presupuesto para aumentar su producción
Mariela Ocón Rodríguez [email protected]
Las plagas han sido siempre un “dolor de cabeza” para los productores. El uso de pesticidas ha dañado muchos cultivos, sin embargo, hoy con la utilización de hongos se pueden controlar y erradicar estos males.
Víctor Sandino docente e investigador de la Universidad Nacional Agraria, (UNA) explicó que desde hace cuatro años atrás viene realizando un trabajo investigativo respecto a cómo utilizar los hongos en el proceso de control de plagas.
Este estudio ha contado con un financiamiento aproximado a los 60,000 dólares los que se han canalizado a través de proyectos que ejecuta el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Sandino explica, que la producción de hongo en aceite o agua es extraída de las especies de los hongos Beauberia bassiana y Metarhizium Aniropliae que facilitan los restos de insectos muertos por causas naturales recolectados en el suelo.
Una vez recolectados los restos o el insecto completo se examina y verifican si las causas de su muerte no corresponden a ninguna enfermedad, así se inicia el proceso de producción de los controladores o plaguicidas.
El estudio surge a raíz de las altas cifras de pesticidas que contaminan el medio ambiente y del alto nivel de pérdidas que se venían dando en los cultivos.
Según el investigador, el estudio forma parte del uso de los controladores biológicos que no dañen el ecosistema y que mejoren la calidad del producto cultivado.
Por el momento, son aproximadamente 80 productores de las zonas de Estelí, Granada, Rivas, Masaya, León y otros departamentos que son beneficiados con los hongos controladores.
“A pesar que llevamos años realizando estudios con hongos para controlar las plagas, aún no podemos proveer a los grandes productores de las muestras por la falta de suficiente presupuesto económico y tecnológico en los laboratorios para aumentar la producción y beneficiar a mayores números de fabricantes de cultivo”, explicó Sandino.
Hasta el momento la bolsita o frasco de hongos para media manzana tiene un costo de ocho dólares, “con esta cantidad no se cubre el costo total de la producción, pero al menos se colabora con los productores”.
A juicio del experto si los pequeños productores desean tener acceso a la compra de hongos deben de realizar una carta solicitando la cantidad que desean y el número de manzanas que tienen cultivadas.
Posteriormente la solicitud es sometida a estudio para determinar qué tipo de plaguicida les es conveniente utilizar.
URGEN DE FINANCIAMIENTO
A pesar de tener la solución en sus manos para un mejor control de las plagas en algunos cultivos tradicionales entre ellos, el café, maíz, algodón, chiltoma, arroz, caña de azúcar, los investigadores de la UNA, aún no cuentan con la suficiente capacidad tecnológica y financiera para producir en grandes cantidades hongos controladores.
El docente dijo que desde que inició el proyecto han buscado empresas que los financie para elaborar a grandes proporciones los controladores de plaga a base de hongos, sin embargo, hasta la fecha no han encontrado una respuesta positiva a su solicitud.
“Nos urge una planta industrial o suficiente presupuesto para echar a andar el proyecto a grandes cantidades elevadas, pues hasta el momento producimos como máximo para 50 manzanas por productor”, indicó.
“La Universidad como institución tiene presupuesto para realizar la producción como estudio de campo y ver los efectos en los cultivos, no así como para procesar el producto de forma industrial”, añadió.
FORMA DE APLICACION
El hongo de aceite o agua se aplica primero en el suelo antes de sembrar las semillas y luego una vez cultivadas en las plantas que presentan hongos o plagas que deterioran su crecimiento.
– “Si es café se le puede echar en las semillas u hojas o sino después de cultivada la planta, puede aplicarse una o tres veces mientras dure la cosecha”, recomendó el docente.
– Sandino aseguró que siempre el hongo debe de aplicarse por la tarde de manera que permita que las radiaciones solares no puedan producir mortalidad en las esporas (partes pequeñas del cuerpo de los hongos) una vez aplicado en las plantas.
– Aunque admitió que muchas veces va en dependencia de la planta y la plaga que está atacando porque no es lo mismo aplicarla en el repollo que en el café, “nosotros le indicamos al productor la cantidad que debe de aplicar y cómo es que tiene que diluirlo en agua”.