- Establecer una política económica de promoción de exportaciones basada en el desarrollo de la industria, objetivo que estaría dando sus frutos en el mediano plazo, es la principal meta del ministro de Fomento, quien asegura que esto conllevaría a la recuperación del agro
- “Hay que resolver el problema de financiamiento que es real y tangible, pero hay que resolver además el problema de la seguridad como también hay que resolver el problema de los ingresos y salarios de los trabajadores en el campo, y los problemas de las estructuras económicas, son cosas reales y percibidas”, afirma Norman Caldera
Gustavo Ortega [email protected]
Es el miembro del Gabinete Económico más accesible a las consultas e inquietudes de los medios de comunicación, se caracteriza por siempre mantener un carácter afable, a pesar de padecer de hipertensión arterial casi permanentemente, según cuenta, desde que asumió la cartera de Fomento, Industria y Comercio.
Norman Caldera dice estar claro de la responsabilidad que le corresponde, tratar de promover e incentivar la inversión, el comercio, la industria y las exportaciones desde la óptica gubernamental, tarea que la ha asumido como un reto, según lo señala.
Se dice apolítico y apartidista, pues asegura que no es sano vincular el trabajo con la pasión política. Cuenta con amplia experiencia en comercio internacional lo que le ha valido enfrentar con buen suceso los recientes conflictos comerciales suscitados con Honduras, Colombia, El Salvador, Costa Rica y Panamá.
Se considera un buen amigo del presidente Arnoldo Alemán, es primo de la difunta esposa del mandatario, María Dolores Alemán y asegura que todas las decisiones que se toman en el Gabinete Económico son asumidas por el presidente.
LA PRENSA: ¿Cómo llegó al Gobierno?
Norman Caldera: Estaba haciendo una consultoría para la cooperación sueca y tuve contacto visual con el presidente Alemán, a quien ya conocía porque aunque no hay una relación co-sanguínea cercana, estuvo casado con mi prima María Dolores, entonces él sabía lo que andaba haciendo por todo el mundo y me dijo que si estaba ayudando en todo el mundo a que exporten, pues que le ayudara a él en Nicaragua y empecé a trabajar como su asesor.
Después asumí la Secretaría Ejecutiva del Comité Ejecutivo de Reforma de la Administración Pública (CERAP), allí estuve dos años, luego cuando surge el litigio con Honduras (por la ratificación del tratado Ramírez-López), no había ministro de Fomento (el anterior asumió la Superintendencia de Bancos), entonces el presidente Alemán me llamó para que buscáramos con enfrentar el problema desde la óptica comercial y así llegué al gabinete.
LP: Entonces debe agradecerle el nombramiento al conflicto con Honduras.
NC: (Risas), te aclaro, me nombraron en medio del conflicto con Honduras y no por el conflicto, pero tal vez ese fue el factor acelerante, un detonante por decirlo de alguna manera.
LP: Si tuviera que nombrarme su principal virtud…
NC: Soy imparcial, no me gusta sesgarme.
LP: ¿Y el mayor defecto?
NC: Soy demasiado distraído, como buen Cardenal (apellido), eso me ha llevado a que la gente me considere petulante, pero a veces paso al lado de las personas y por venir pensando en otros asuntos, no los saludo, eso es recurrente. Ando desconectado, con eso definitivamente no gano votos, menos mal que no soy político.
LP: ¿Tiene algún pasatiempo especial?
NC: Desde muy joven he tenido acceso a computadoras, luego mis hijos cuando estábamos en el extranjero y me visitaban mis parientes ellos me preguntaban por qué eran mis parientes, pues no los conocían. Eso me conllevó a trabajar en la creación de un registro de archivos familiares de Nicaragua, son una especia de árboles genealógicos. Tengo registradas a 52,000 personas. A eso yo le dedico dos horas diarias al menos, ese es mi hobbie.
LP: Usted es uno de los pocos ministros que no pertenece al Partido Liberal, ¿por qué?
NC: Aquí hay un fenómeno especial en Nicaragua, hay sandinistas que no saben quién fue Rosa Luxemburgo, socialdemócratas que no saben diferenciar entre la Segunda y Tercera Internacional, hay socialcristianos que no saben que el principio de subsidiaridad del Estado aparece en la Encíclica Cuadragésimo Anno y liberales que no saben quién era Juan Jacobo Rousseau, no sé, los partidos tienen más de liderazgo personal y de carisma que de bases ideológicas fuertes, claras, eso me ha mantenido alejado del juego partidario mismo. Hay que hacer el bien por Nicaragua desde las posiciones donde se pueda hacer.
Le doy las gracias al presidente Alemán y al vicepresidente (Enrique) Bolaños por darme la oportunidad de usar mi experiencia para levantar las exportaciones.
LP: Habla de que los partidos políticos se van por el liderazgo personal y el carisma, podría ser el caso del partido de gobierno también…
NC: Ahí se juntaron varios aspectos, hay una estrategia inclusiva, una Alianza Liberal, fue una unificación de varias corrientes.
LP: Pero esa unión ya es desunión, están fuera el doctor Alvarado, don Eddy Gómez…
NC: Tal vez yo no estoy los suficientemente metido en política para decirte con exactitud si esas son divisiones insuperables o si al final a arreglar, me inclino por lo último, son más bien, podemos decirlo signos de un partido que empieza a madurar, en los mismos Estados Unidos sucede. Pero a como te digo yo veo las cosas desde afuera.
LP: ¿Considera que es sano que un servidor público se desvincule de la política?
NC: Hay política con mayúscula y política con minúscula, creo que no es posible desvincularse de las políticas, un ministro debe tomar como parámetros la aplicación de políticas, pero con mayúscula, no politiquerías. En ese sentido un ministro no puede separarse de las políticas del gobierno, por el contrario debe ofrecerle al presidente opciones y en eso hemos estado trabajando.
LP: Está frente a un ministerio que tiene una amplia gama de tareas y esfuerzos, ¿cuál es la prioridad de esta entidad?
NC: Tenemos que fomentar la producción, si no producimos Nicaragua se estanca, para eso tenemos que contar con las condiciones que lo permitan. El asunto que hay que tener en cuenta es que muchos problemas que se tildan de económicos son psicológicos. Por eso hay que tomar en cuenta soluciones que tomen en cuenta el aspecto psicológico.
LP: Pero hay problemas tangibles que no rayan nada en lo psicológico, los productores no tienen créditos, el clima acaba con sus cosechas, tienen embargos encima, ellos quieren producir pero no han podido…
NC: Ese es el problema de los enfoques y las soluciones, primero hay que resolver esto, los economicistas pensaban primero en resolver los problemas económicos y luego repartir, las soluciones de tipo de gobernabilidad se llevaban a extremos totalitaristas, es el caso del nacional-socialismo (nazismo) y luego estaba el socialismo, que había que repartir primero y después vendría el paraíso y yo creo que estos tres enfoques están equivocados.
LP: Entonces ¿cuál es el correcto?
NC: Hay que resolver el problema de financiamiento que es real y tangible, pero hay que resolver además el problema de la seguridad como también hay que resolver el problema de los ingresos y salarios de los trabajadores en el campo, y los problemas de las estructuras económicas, son cosas reales y percibidas, aquí hay mucho de percepción y cuando me refiero a lo psicológico me refiero a la parte de percepción, es tan importante como la realidad a la hora de gobernar. Hay que buscar no sólo cómo hacer bien las cosas sino que se perciba que están bien hechas.
LP: También la industria no está nada bien.
NC: Hemos estado discutiendo en un comité industrial en el que está el presidente del Banco Central, el Ministro de Hacienda y tres representantes de la industria, las posibles soluciones de corto plazo. Ya hemos enviado esas recomendaciones a la Presidencia y esperamos que en un corto plazo esas recomendaciones con sus modificaciones respectivas estarán siendo aplicadas como parte de un paquete de medidas económicas para que Nicaragua logre recuperarse de este nuevo desastre, desgraciadamente Nicaragua no sólo padece de desastres naturales, sino que los hombres también contribuimos a ese desastre.
LP: ¿Se refiere a la situación del Interbank?
NC: Me refiero a la situación de los cafetaleros, al financiamiento del café.
LP: Estas medidas que estudian para el sector industrial ¿en qué consisten?
NC: Más que todo en quitar incongruencias que existen en la política arancelaria, el presidente nos dio algunas indicaciones de caminos a explorar, aquí se incluye la reactivación en el área tecnológica.
LP: Parece ser que el presidente ya cuenta con más experiencia en los aspectos de política económica…
NC: Desde que yo he estado participando en el Gabinete el presidente se ha metido de lleno en la dirección del Gabinete Económico, él siempre lo ha presidido y se han dado largos debates en las reuniones.
LP: Se rumora que lo que él propone se debe hacer ley, ¿es cierto. Acepta modificaciones a sus propuestas?
NC: En mi experiencia sí.
LP: ¿Cómo es la relación en el seno del Gabinete Económico?, siempre se ha señalado que hay mucha tensión por diferencias personales.
NC: Hay diferentes estilos de hacer las cosas, hay quienes tienen perfiles más altos otros más bajos, hay quienes quieren hacer estruendo y hay quienes no, hay quienes buscan cámaras y quienes no, lo que yo he visto en el Gabinete Económico es una amplia y sana discusión, a veces encontradas, al final el Presidente toma sus decisiones. Con un lado a veces, a veces otros, no hay patrón de que siempre respalde la posición de una persona u otra. El sigue sus propios instintos, sus conocimientos en este campo.
LP: ¿Cuando esos instintos no van a causar beneficio general se le advierte?
NC: El presidente siempre está abierto al debate, ha habido largas discusiones, una de ellas fue cuando se iba a fundar el Fondo de Crédito Rural, fue muy interesante.
LP: Volviendo al aspecto económico, ¿se trabaja también en el análisis del sector comercio?
NC: La demanda de bienes duraderos en Nicaragua se acumuló durante 10 años, por otro lado hay remesas familiares que crean una demanda, pero esto no puede ser una política de largo plazo, hay que buscar cómo incrementar las exportaciones para sustituir las remesas y disminuir la ayuda internacional.
En la medida que la política sea beneficiosa, menos gente saldrá del país y menos remesas tienden a disminuir, pero si la situación continúa mal y la gente sigue saliendo, las remesas crecerán.
LP: La gente se pregunta: “¿cuándo será exitosa esa política económica?
NC: Es una buena pregunta, aquí hay dos aspectos, el problema de la deuda, aquí destacaría el esfuerzo de los tres años del gobierno en reducir el lastre de la deuda, tal vez ahora no se nota un mayor involucramiento, ni es una mayor injerencia o dedicación a otras áreas económicas, sino que se hicieron los sacrificios para llegar al punto de decisión de la HIPC. ¿Que no se tomaron decisiones que no eran políticas?, sí es cierto, hubiera sido políticamente fácil para el presidente tomar decisiones populistas, salir montado en un caballo blanco y dejar al gobierno próximo el clavo de la deuda. Yo creo que hay que reconocer que se ha hecho un esfuerzo de desgaste político que se sabía le iba a costar al presidente pagar la decisión valiente en el área económica, es fácil quedar bien con la gente y ganar votos pero hubiera dejado a Nicaragua rempujada.
CAFE ESTA MUY VULNERABLE
Para el ministro de Fomento, Industria y Comercio, la problemática que enfrenta el sector cafetalero se origina de la unión de problemas de coyuntura con afectaciones en la estructura productiva.
Aseguró que la parte estructural viene desde que se suspendió el Programa de Renovación de Cafetales en 1996, programa cuyo costo ascendía a 54 millones de dólares financiados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) de los cuales sólo fueron desembolsados 30 millones por el incumplimiento de pago de parte del gobierno ante ese organismo.
Dijo que por esa razón los cafetaleros decidieron conseguir préstamos de corto plazo con la banca privada, situación que provocó la iliquidez del sector pues financiarían una actividad de largo plazo con préstamos de corto plazo.
“Luego vinieron los descensos de precios y se volvieron más vulnerables”, indicó.
Otro aspecto que a juicio de Caldera viene a agravar la situación cafetalera son las afectaciones financieras provocadas por la empresa comercializadora Agresami, la que supuestamente está comercializando café de manera irregular.
“El problema en el café no sólo es el financiamiento, pues no es una respuesta única, se ha hablado de programas de fomento con participación de capital accionario, eso hay que revisarlo con calma”, apuntó.
COMERCIO, SU ESPECIALIDAD
Padre de tres hijos, Norman Caldera cuenta con un extenso currículum centrado en su especialización en comercio internacional.
– Ha formado parte del claustro de académicos en universidades de Guatemala, Honduras y Nicaragua
– Licenciado en Mercadotecnia Internacional y Economía del Desarrollo, graduado en Austin, Texas. Obtuvo un Diplomado en Mercadeo Internacional en Nueva York y un Master en Administración Industrial en Virginia, Estados Unidos
– Es candidato a obtener un PhD (doctorado) en Leyes del Comercio Internacional en la Columbia Pacific University en California
– Fue Director del Centro Nicaragüense de Promoción de Exportaciones entre 1975 y 1979
– Fue funcionario de las Naciones Unidas, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y actualmente es el Gobernador por Nicaragua ante el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).