- Ciudadanía demanda su restauración
Valeria González [email protected]
La mayoría de los niños capitalinos carecen de lugares para dar rienda suelta a sus energías, jugar, correr, ir de un columpio a otro, resbalarse, o subir y bajar por los juegos, ya que la mayoría de los parques infantiles de Managua se encuentran en mal estado.
En un recorrido que realizó un equipo de LA PRENSA por los parques infantiles de las Américas Uno, el Luis Alfonso Velázquez, la entrada a la Primero de Mayo, Villa Venezuela, la Máximo Jerez y Reparto Schick, se constató que estos lugares estaban deteriorados como consecuencia del olvido de la Alcaldía de Managua y el vandalismo de las pandillas, denunciaron pobladores de los lugares en mención.
Uno de los parques infantiles sumados al olvido es el de Ciudad Jardín, donde el sarro y la delincuencia han deteriorado los juegos, y los niños huelepega rondan el mismo.
“En este parque reina Sodoma y Gomorra porque los ladrones y los huelepega se posesionan del lugar y despojan a los transeúntes de sus pertenencias. Con los sandinistas es cierto que pasamos malos ratos pero existían centros para recrear a estos niños”, comentó María Saballos, quien en su infancia tuvo la oportunidad de jugar en este parque.
Ella junto a su hija, Leslie Porras, transitaban por el lugar en horas de la mañana pero con mucha prisa por temor a ser sorprendida por los antisociales.
Leslie pidió a las autoridades restaurar el parque porque desea tener la oportunidad que tuvo su mamá, hace unos años, de jugar con tranquilidad en el parque sin temor a los antisociales.
Por su parte Erasmo Suárez, afirmó que el parque de Ciudad Jardín “es una gran cochinada”, porque la basura está por doquier, mientras los borrachos y los huelepega han marcado el parque como propio.
“Hoy en día los niños han sido privados de un beneficio y es necesario que las autoridades pongan manos en el asunto”, manifestó Nora Vásquez.
“La Alcaldía de Managua está trabajando en un plan para mejorar 40 parques, pero enfrenta un gran problema como es el afán de destrucción de las pandillas y los antisociales”, manifestó Eduardo Romero, vocero de la Municipalidad.
Indicó que los habitantes de las comunidades donde están ubicados los parques por temor a las acciones delictivas de las pandillas no pueden resguardarlos. Para evitar el deterioro en los mismos es necesario que la Policía Nacional también colabore con la Comuna.