- “La gente que vive en pobreza no tiene suficiente dinero como para comprar los alimentos. Entonces hay una relación directa entre la pobreza y el nivel de seguridad alimentaria en una población”, expuso Ghyoot
Nidia Ruiz López [email protected]
El representante de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), Jean Francois Ghyoot, dijo que en el mundo hay suficientes alimentos para alimentar bien a la población, pero el problema es la distribución y el acceso de los diferentes sectores.
“La gente que vive en pobreza no tiene suficiente dinero como para comprar los alimentos. Entonces hay una relación directa entre la pobreza y el nivel de seguridad alimentaria en una población”, expuso Ghyoot.
Dijo que analizando las cifras globales, Nicaragua de 1990 a 1999 ha incrementado el área de siembra de muchos de los productos de consumo básico, pero le sucede lo mismo que a nivel mundial.
Señaló que hay grupos vulnerables que no han producido alimentos en la última cosecha y que no tienen dinero para la compra de alimentación.
“Aunque a cinco kilómetros puede haber un mercado con todo lo necesario para alimentar a la familia, pero no tienen centavitos, entonces la única posibilidad es que la comunidad internacional aporte alimentos”, comentó Ghyoot.
La producción de frijoles aumentó de 150,000 manzanas en 1990 a 300,000 en 1999. Igual sucede con el arroz que pasó de 55,000 manzanas a 88,000, mientras el maíz subió de 250,000 manzanas a 365 mil manzanas.
Pero el nivel de la calidad del consumo de los habitantes no ha sido tan favorable como el incremento de la producción, ya que se ha aumentado en unos rubros y ha bajado en otros tan sensitivos como la leche.
El representante de la FAO dijo el consumo de frijoles se ha mantenido entre 1990 y 1999 en el rango de los 15 kilos por habitante por año. Mientras el arroz ha aumentado el consumo, porque en 1990 se consumían 27 kilos por año por habitante, ahora es de 42 kilos
Ghyoot dice que una de las causas del aumento en el consumo de arroz, puede ser por el precio del arroz que se importa.
En el caso del maíz el consumo ha disminuido y pasó de 50 kilos por habitante por año, a 42. Igual le sucede a la leche que pasó de 44 litros por habitante por año, a 29.
“Ha disminuido el consumo de leche por año y eso no esta bien”, manifestó el representante de la FAO.
Pero el consumo de aceite se ha incrementado, pasando de 6.4 kilos por año a 8.9. “Se nota que la gente come con mucha grasa”, indicó. También ha subido el consumo de azúcar que pasó de 26 kilos en 1990, a 34 en 1999.
“De acuerdo a las cifras globales, aparentemente la gente come de manera menos sana que hace 10 años. No se esta comiendo bien y tal vez eso se debe al nivel de ingresos de la gente, entonces si a la vez la gente tuviera un ingreso bueno y pudiera comprar lo que quiere, tal vez compraría alimentos más sanos”, expuso el representante de la FAO.
En Nicaragua la pobreza ha sido medida con dos metodologías. La primera por necesidades básicas insatisfechas, que muestra un 73 por ciento de la población en situación de pobreza y un 44 por ciento en situación de extrema pobreza.
La otra metodología valora el consumo de las personas con las necesidades nutricionales mínimas y un gasto adicional para salud, educación y vivienda, indicando que hay un 48 por ciento de la población en condición de pobreza y de ellos el 17 por ciento en pobreza extrema.