14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

El amor debe de ser luz y no oscuridad

ESTIMADA PSICOLOGA Quiero felicitarla por la gran ayuda que le da a las personas que escriben. Considero que sus consejos han sido de gran utilidad para muchos. Quisiera exponerle mi caso, para que me oriente. Tengo 19 años y hace un año y medio me hice novia de un muchacho que quiero muchísimo. Nuestro noviazgo […]

ESTIMADA PSICOLOGA

Quiero felicitarla por la gran ayuda que le da a las personas que escriben. Considero que sus consejos han sido de gran utilidad para muchos. Quisiera exponerle mi caso, para que me oriente. Tengo 19 años y hace un año y medio me hice novia de un muchacho que quiero muchísimo. Nuestro noviazgo duró un año y tres meses y en todo ese tiempo tuvimos nuestros buenos momentos, pero muchos momentos malos.

Nuestra relación causó mucho impacto ante todos, ya que él es el típico mujeriego y yo fui prácticamente su primera novia formal. Su familia me aprecia mucho.

Mi problema es que me enteré que cuando llevábamos seis meses, él me fue infiel. Yo lo sospeché pero hasta hace cuatro meses lo confirmé y por eso decidí cortarlo. Yo sufrí mucho, me la pasaba todo el tiempo llorando; porque él fue mi primer novio. Y siendo que le di todo el cariño, respeto y comprensión que se le puede dar a una persona, siento que él no me valoró.

Se me hace muy difícil olvidarlo, porque siempre lo veo en la universidad y él me busca. Dice que me ama, y siempre me cela cuando me ve con otro muchacho… pero no lo entiendo porque me comienza a llenar la cabeza de ilusiones, pero dice que no se siente preparado para volver para no hacerme daño.

Yo estoy consciente que debo olvidarlo y que lo mejor es alejarme de él… pero se me hace muy difícil y tengo miedo de no poder hacerlo. Yo lo quiero demasiado y “yo sé que él (a mí) también”.

En conclusión, no sé que hacer. Si darle una oportunidad cuando él esté dispuesto realmente a cambiar o definitivamente olvidarlo. Ayúdeme por favor, que esta lucha entre la razón y el corazón, me está matando.

RESPUESTA

En una relación de pareja se hace difícil poder comprender todas las situaciones que en ella se viven, porque estamos hablando de que entran en juego dos personalidades distintas, con su forma particular de pensar cada una de ellas, distintos intereses, compromisos y diferentes niveles de asumir responsabilidades.

Se hace más complicado aún porque en nuestro proceso de socialización aprendemos diferentes formas de comportarnos ante la vida. La sociedad le enseña a los hombres a ser rudos, independientes y poco expresivos, mientras que a las mujeres se nos prepara para ser sumisas, dependientes, muy atentas a las necesidades de los otros, muy emotivas y tiernas.

Estas diferencias se ven más marcadas cuando dos personas se unen para hacer pareja, porque la visión, el compromiso y la responsabilidad se asumen a diferentes niveles, dependiendo mucho de los intereses.

En una relación la mujer esta dispuesta a hacer sentir bien al otro, servir y satisfacer las expectativas del otro, mientras que la intención del hombre es que le sirvan y le hagan sentir bien. Desde esta perspectiva las mujeres entramos a una relación de pareja con una gran desventaja.

Ahora te pregunto: ¿Cuánto de todo este aprendizaje has interiorizado y lo has hecho tuyo? ¿Has hecho de las necesidades de él algo más importante que las tuyas propias? ¿Cuánto tiempo más vas a esperar pasiva que sea él quien decida qué pasará en tu vida?

No es justo ni tiene derecho de entrar y salir en tu vida las veces que a él le dé la gana. Mientras vos sufrís, lloras, él está sacándole ganancias a las ventajas que la sociedad le confiere por ser hombre.

¿Y vos, y tus necesidades, cuándo van a ser tan importantes como para que las note y las tome en cuenta? Vos no sos un juguete y por eso no debes permitir que te traten como tal.

El amor no debe ser ciego, ni mucho menos convertirse en nuestro propio enemigo, causándonos daño y haciéndonos sentir mal. El amor debe de ser luz y no oscuridad, risa y no llanto, fuerza y no debilidad.

Te invito a que revises, pero que principalmente cuestiones, cuál es el rol que como mujer estás asumiendo en esta fase de tu vida. Cuando logres hacerlo te vas a dar cuenta que asumir un rol más protagónico y positivo hacia una misma te da la seguridad de decidir y ser vos las que dirija tu vida y no otros(as).

Lic. Karla Olivares Pérez
Psicóloga Integral

Aquí Entre Nos

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí