14
días
han pasado desde el robo de nuestras instalaciones. No nos rendimos, seguimos comprometidos con informarte.
SUSCRIBITE PARA QUE PODAMOS SEGUIR INFORMANDO.

Keith Andrews: Director de Zamorano.

Keith Andrews: “ Estudiantes nicas tienen muchas deficiencias”

Los estudiantes nicaragüenses que aplican en la Escuela Agrícola Panamericana de Zamorano, han mostrado más deficiencias en algunas materias en comparación al resto de candidatos de Latinoamérica, indicó Keith Andrews, director de la Escuela. Asegura además que el agro nica tiene mucho futuro. “ Generar empleo es la clave para reducir la pobreza. No es […]

  • Los estudiantes nicaragüenses que aplican en la Escuela Agrícola Panamericana de Zamorano, han mostrado más deficiencias en algunas materias en comparación al resto de candidatos de Latinoamérica, indicó Keith Andrews, director de la Escuela. Asegura además que el agro nica tiene mucho futuro. “ Generar empleo es la clave para reducir la pobreza. No es producir más alimentos sino generar empleos”, reiteró

Juan Carlos Bow [email protected]

Keith Leslie Andrews desempeña uno de los cargos más importantes en el ámbito de la educación agrícola latinoamericana. Es el director general de Zamorano, la Escuela Agrícola Panamericana calificada como uno de los principales centros de educación superior de Latinoamérica, especializado en agricultura, recursos naturales y desarrollo rural.

LA PRENSA: ¿Cómo puede superar Nicaragua la falta de alimentos?

Keith Andrews: Existe la posibilidad de responder al déficit de alimentos no vía producción de más alimentos directamente, sino por el enfoque de una mejor distribución de lo que existe, o generando más trabajo, permitiendo a la gente pobre comprar alimentos.

En Centroamérica, especialmente en Nicaragua, existe un gran potencial de cultivos y productos para la exportación, lo que generaría divisas y trabajo necesarios para atender las necesidades alimenticias.

Sobre los factores que afectan la producción, si uno pregunta a los productores, es falta de crédito, en algunos casos falta de acceso a tierras, en otros las lluvias o problemas de infraestructura. Yo diría que el factor que limita la producción de granos básicos es básicamente la falta de recursos humanos debidamente preparados, porque en los países educados o con pueblos con alto nivel de educación práctica, siempre encuentran la manera de satisfacer sus necesidades alimenticias.

En muchas partes del mundo hay países con todas las ventajas comparativas, en términos de suelo y agua, que tienen hambrunas horribles. Se debe a la falta de visión, conocimientos técnicos, compromisos y organización, más que a la falta de capacidad productiva.

LP: ¿Qué más influye en la mejoría de la producción?

K.A: Siempre pongo énfasis en la educación, desde la primaria hasta la universitaria y postgrado, hablo de un tipo de educación con un enfoque práctico, un deseo de lograr hacer algo de importancia en el mundo real, en este caso sería en el campo.

También se necesita información que anime a la gente a dejar su fatalismo, su pesimismo, y trabajar duro y comprometerse a hacer el trabajo necesario para aplicar las tecnologías, los conocimientos y los recursos de una manera productiva.

LP: ¿Cómo harían los productores que no tienen recursos para educarse?

K.A: Un país que no encuentre la manera de educar a la próxima generación no tiene futuro, en el mundo moderno si no está educando a las personas que mañana van a ser los productores y los líderes, no va a ser competitivo y no verá mejoría en el desarrollo.

Es el problema de Nicaragua en este momento, no hubo en los últimos cien años la inversión en los recursos humanos.

Países como Costa Rica empezaron hace cien años con una política constante de inversión en su pueblo y hoy, cuatro generaciones después, están cosechando los frutos. Nicaragua puede progresar mucho, pero antes debe encontrar la manera de que los hijos e hijas de campesinos tengan acceso a una educación primaria y secundaria.

Educación de calidad, relevante y práctica. Esa es la clave y no hay otro camino para el progreso. Eso es lo que han enseñado pueblos como Israel, Taiwan y Japón.

L.P: Los productores se quejan de bajos rendimientos. ¿Qué les falta?

K.A: Para mí los productores deberían invertir más inteligentemente, para producir más, porque es muy difícil encontrar la manera de invertir menos en busca de mayor y mejor producción.

Se puede invertir más pero con inteligencia, hay muchas técnicas que se pueden usar para intensificar la producción agropecuaria, vía uso de insumos locales, es decir no tenemos que presuponer la necesidad de comprar insumos en el mercado.

A veces se tiene que invertir en más trabajo y esfuerzo para producir los materiales localmente, como abonos orgánicos. Es importante reconocer que la producción requiere inversión en esfuerzo, dinero y trabajo inteligente.

Nicaragua necesita invertir mucho en proteger y restaurar el ambiente, porque las bases para una buena producción agropecuaria son el ambiente, la biodiversidad, el suelo y las fuentes de agua.

Si tenemos una tendencia de minar los recursos naturales y no reponer lo que estamos sacando del suelo o no proteger las cuencas, pronto vamos a estar en apuros.

LP: ¿Qué ajustes necesita la producción agrícola para competir en un mercado abierto?

K.A: Todos los productos en este momento están muy desanimados. Si no, mira el precio del café y del azúcar, los precios de todo lo que exportamos están muy bajos. Esperamos que sea cíclico y no permanente.

Algunos agroempresarios centroamericanos tienen mucho éxito y personas que han encontrado su nicho y son competidores de calibre mundial. Exportadores de camarón, melones, ciertos exportadores de mango, son ejemplo. En Nicaragua hay exportadores que incluso tienen cultivos orgánicos exitosos.

Uno puede producir con cultivos adecuados y valor agregado suficiente en una hectárea muy lucrativa, para compensar lo que sería la producción de cientos de manzana de maíz.

Tenemos que tecnificarnos selectivamente y tener el compromiso de producir lo que demanda el mercado y hacerlo llegar en el momento oportuno, con la calidad necesaria y a los precios adecuados.

Nicaragua tiene un potencial extraordinario para ser competitivo a nivel mundial, lo aprovecharía si puede atender los problemas de infraestructura, tener un transporte rentable y eficiente y recursos humanos con un grado de preparación adecuado.

NICARAGUA: BUENOS SUELOS Y BIODIVERSIDAD

LP: ¿Favorecen los tratados comerciales el desarrollo agropecuario?

K.A: Puede desarrollarse si cada país y región dicen qué ventajas comparativas tienen y cómo van a aprovecharlas. En mucho casos va a significar abandonar granos básicos producidos en laderas con bajos rendimientos y costos ambientales grandes, por frutales o árboles maderables.

Nicaragua podría suplir a Centroamérica carne de res, porque tiene ventajas comparativas. También grandes ventajas en ciertas zonas para producir leche y podría producir y exportar muchas hortalizas, cuando los mercados norteamericanos demanden eso.

LP: ¿Por qué países como Nicaragua, que tienen ríos y lagos, carecen de producción acuícola?

K.A: Los nicaragüenses deben hacer la introspección y decir por qué hemos desaprovechado tantos recursos. Los suelos que ustedes tienen por Chinandega son los mejores de Centroamérica y están entre los mejores del mundo. ¿Cuánta riqueza está produciendo esa zona? No lo que podría, no sé cómo desaprovechan las áreas para los bosques más productivos de América Central. ¿…O es que tienen una mentalidad extractiva y no de implantaciones?

Nicaragua no tiene menos biodiversidad que Costa Rica, pero Costa Rica se vende a nivel mundial como el gran salvador y museo vivo de biodiversidad.

L.P: ¿Cómo cambiar esa mentalidad extractiva?

K.A: Educación, pero no simple alfabetización, hablo de una educación que cree autoconfianza, que cree personas cosmopolitas que quieran captar los conocimientos del mundo, validarlos y aplicarlos acá. Personas que puedan moverse en el mundo entero para establecer un mercado y aprovechar los nichos para crear empresas productivas en Nicaragua.

Un problema de muchos países de América Latina, es que los sistemas educativos ven demasiado hacia el pasado e internamente.

Los taiwaneses tienen un gran sentido de autoconfianza e identificación cultural, pero su sistema educativo prepara a los jóvenes para moverse internacionalmente, poder usar otros idiomas, entender otras culturas y tener éxito en el mercado mundial.

Aquí en América Latina dedicamos demasiado tiempo a estudiar los próceres, enfocar en el pasado y lamentar nuestra situación.

ESTUDIANTES NICAS CON DEFICIENCIAS

L.P: ¿Cómo valora la educación de Nicaragua?

K.A: No sé, pero puedo decir que en general los estudiantes nicaragüenses tienen más dificultades con nuestro examen de admisión que los alumnos de los otros países centroamericanos.

En general, los estudiantes nicaragüenses tienen deficiencias mayores en matemáticas y ciencias básicas. Puedo decir que Nicaragua no está ni cerca de los estándares internacionales de preparación secundaria a los que debe aspirar.

L.P: ¿Tiene la agroindustria perspectivas a corto plazo?

K.A: Si nosotros vemos la cadena de valor agropecuario desde la producción hasta el procesamiento y la distribución, llegando al consumidor, nos damos cuenta que la producción de materia prima es una fracción del valor total.

En Nicaragua hay cualquier cantidad de oportunidades de agregar valor a la materia prima que ya producen. Al tener plantas agroindustriales, se puede crear un proceso de demanda desde el campo hacia la planta que puede fortalecer mucho la economía rural.

Al agregar valor se genera mucho trabajo y el trabajo es necesario para asegurar que haya una capacidad adquisitiva, para que las personas pobres puedan conseguir alimentos y costear la educación de sus hijos.

Generar empleo es la clave para reducir la pobreza. No es producir más alimentos sino generar empleos y la agroindustria es excelente para eso. Cada trabajo en una planta puede crear media docena o diez trabajos en el campo.

PROCESAMIENTO DE MADERA

TIENE FUTURO

L.P: ¿Qué productos tienen más posibilidad en Nicaragua?

K.A: El tabaco, frutas, verduras y camarones. Pero un área en que los nicaragüenses podrían ser los líderes mundiales, es el procesamiento de madera, la artesanía en madera es bella en este país. Pero, ¿cuál va a ser el futuro de esta industria si no se están sembrando árboles? No se puede mantener esa industria por muchos años cuando se tiene una actitud extractiva. Esta agroindustria podría generar mucho trabajo, vender oxígeno, mejorar el ambiente, proteger las cuencas y asegurar la materia prima para otras generaciones de artesanos.

L.P: ¿Cuál es la situación del mercado laboral de los agrónomos en Centroamérica?

K.A: Hay una sobreoferta en América Latina de profesionales agropecuarios preparados para enfrentar los retos de ayer. Por esta sobreoferta, de quienes no responden a las necesidades del presente y futuro, el salario tiene que ser bajo.

Hay programas que son excepciones, como el Zamorano, ya que nosotros tenemos a nivel continental una tasa de desempleo virtualmente del cero por ciento. Mientras en general los profesionales agropecuarios tienen una tasa de desempleo entre 30 y 50 por ciento.

Básicamente, el concepto de ingeniero agrónomo tradicional es un anacronismo que ya no tiene valor para el mundo moderno. Una universidad que no ha logrado transformarse y salir del pénsum de los años 1960 y 1970, no tiene futuro y no responde a las necesidades de la sociedad moderna.

L.P: ¿Ayudan los productos orgánicos a fortalecer las economías?

K.A: Crecen en importancia, pues tienen mercados muy interesantes. Los países tropicales, como Nicaragua, deben estar atentos a los productos orgánicos. No son panaceas, igual que todos los productos agropecuarios tienen riesgos.

Mí temor es porque la producción orgánica crece más rápido que la demanda y ésta crece a un ritmo muy alto, pero no tanto como los productos. Tarde o temprano vamos a ver una reducción en el sobreprecio de los productos orgánicos.

INGRESO AL ZAMORANO

El Zamorano fue constituido en 1942 en el Estado de Delaware, Estados Unidos, y desde 1946 hasta 1998 ha graduado a 4,360 agrónomos, entre estudiantes latinoamericanos y europeos. De 1988 a 1998 graduó a 753 latinoamericanos como Ingenieros Agrónomos.

– El primer paso para estudiar en el Zamorano es realizar un examen de admisión, que incluye una entrevista personal. Estos exámenes se aplican durante el año en toda Latinoamérica.

– Estudiar en el Zamorano representa un gasto aproximado de 17,500 dólares por año, por estudiante. Sin embargo, la institución ofrece un subsidio de 7,000 dólares del costo total anual. Como resultado, el costo total para el 2001 es de 10,500 dólares por alumno.

– Estos 10,500 dólares cubren 11 meses de estudios, alojamiento, alimentación, ropa de cama, uniformes, seguro contra incendios, acceso a asistencia médica básica y de primeros auxilios.

– El valor total de la matrícula debe pagarse en tres cuotas: el 30 de noviembre 4,200 dólares; el 31 de marzo siguiente 3,150 dólares y el 31 de julio 3,150 dólares.  

Economía

Puede interesarte

×

El contenido de LA PRENSA es el resultado de mucho esfuerzo. Te invitamos a compartirlo y así contribuís a mantener vivo el periodismo independiente en Nicaragua.

Comparte nuestro enlace:

Si aún no sos suscriptor, te invitamos a suscribirte aquí