- Cafetaleros del área acordaron destruir un porcentaje del grano para reducir la oferta
- Eliminarán sólo producto en mal estado
Nidia Ruiz Ló[email protected]
Los cafetaleros nacionales agrupados en la Unión Nicaragüense de Cafetaleros (Unicafé), manifestaron que ellos apoyan cualquier medida encaminada a la regulación del comercio del grano de oro para lograr la recuperación de los precios internacionales, es el caso de la destrucción de un porcentaje del grano.
El pasado jueves, los cafetaleros de Centroamérica y México decidieron destruir parte de la producción de baja calidad para lograr un repunte de los precios, así como estimular el consumo de café de mejor calidad.
Amílcar Navarro, presidente de Unicafé, manifestó que el desechar o destruir un porcentaje aún no determinado puede que produzca un impacto positivo en los precios.
Consideró que esta iniciativa de destrucción del café de segunda calidad, se tomó en vista de que los “especuladores” del grano apostaban a que los países productores, iban a exportar toda su producción debido a problemas económicos, y de esta forma no cumplirían con el plan de retener el 20 por ciento de la producción acordado en mayo de este año.
“Esta medida -la de desechar café- aunque parezca drástica, es necesaria porque se compensará con mejores precios”, indicó el presidente de Unicafé.
Expuso que el café de segunda calidad es utilizado en muchos casos para el consumo nacional y para la exportación.
Agencias de prensa señalan que la propuesta de desechar una cantidad aún determinada del grano de bajo calidad, será presentada a las cancillerías de cada uno de los países, para que luego sea presentada a los gobiernos, además de remitirla a otros grandes productores como Brasil y Colombia para su consideración.
Según Arnoldo López, presidente del Instituto del Café de Costa Rica (Icafé), la intención es que la propuesta sea firmada por los presidentes del área y de México el 30 de noviembre, un día antes de la toma de posesión de Vicente Fox.
Navarro manifestó que una vez que se oficialice la decisión de destruir el café, se deben reunir todos los actores de la cadena agroindustrial cafetalera para analizar más a fondo la situación.
En el encuentro de San José, no se dieron a conocer los procedimientos ni la cantidad, aunque la propuesta mexicana era de destruir el 10 por ciento.