Tola está ubicada a 124 kilómetros de la capital y a sólo 13 de la cabecera departamental, Rivas. De todos los municipios del país, Tola ocupa el primer lugar en estado de pobreza.
Sin embargo, este municipio, que es el más extenso de Rivas, en los últimos años ha visto llegar un poco de progreso con la construcción de más de 30 escuelas de primaria, 3 institutos de secundaria, 7 centros de salud, luminarias en varias comarcas y lo más importante, una comunicación más fluida con la construcción de la moderna carretera Tola-Rivas.
Tola es como todos los pueblos alejados de los grandes núcleos poblacionales de las ciudades del Pacífico, un lugar donde todavía se puede dormir la siesta sin escuchar el estridente ruido de los buses urbanos tratando de saltarse los semáforos, ni el tropel de las pandillas juveniles apedreando a todo lo que se mueva en las calles.
Un amplio parque luce frondoso, frente a la parroquia San Juan Bautista, que forman el centro de este pueblo donde aún se conservan muchas casas construidas de taquezal y algunas de amplios corredores que dan hacia la calle.
Aunque el pueblo no cuenta con salas de cine, video ni centro de recreación para los jóvenes, la juventud en este lugar es muy sana y en su mayoría se dedican a actividades deportivas como el béisbol, básquetbol o el fútbol, aunque hay algunos que prefieren ir a Rivas a bailar a las discotecas.
LAS FIESTAS DE GUADALUPE
A pesar que el templo está dedicado a San Juan Bautista, los “toleños” celebran con gran pompa las fiestas en honor a la Virgen de Guadalupe, que empiezan a finales de noviembre y finalizan a mediados de diciembre.
Para visitar este apacible pueblo si se va de Managua, hay que tomar el bus de transporte Interdepartamental en el Mercado “Roberto Huembes”. Cuando vaya llegando al kilómetro 111 de la carretera a Rivas debe pedir la parada, porque esa es la entrada a Tola.