Orlando Valenzuelay Carol Munguía
La imagen de la Virgen del Hato, es una réplica de la Virgen del Trono, su diferencia se basa en que la primera lleva un sombrero ranchero y la segunda la corona real.
Cuenta la historia que esta imagen encontrada en los alrededores de la Ermita del Hato, es la creación de creyentes católicos que no podían llegar hasta El Viejo a rendirle tributo a Nuestra Señora del Trono, y ese era el lugar más accesible para que miles de campesinos se concentraran para rendir honor y gloria, a la Reina de los Cielos y Tierra.
La Virgen salió el pasado miércoles del Hato. Centenares de excursiones de todas partes de la geografía local se dieron cita para la despedida que le brinda la localidad.
Con atuendos tradicionales como el sombrero con lienzo rojo y la varita quemada como bastón, que es el símbolo de los peregrinos que llegan a pagar promesas por gracias recibidas.
Ahí encontramos a Paula Acosta, originaria de la comunidad La Grecia, quien recorrió el trayecto en carreta para pagar la promesa a la venerada imagen.
Un testimonio más conmovedor fue el de Amanda Núñez Poveda. Sobre gruesas piedras y solamente auxiliada por toallas utilizadas como alfombras, ella cubría sus rodillas mientras caminaba desde la entrada del área donde se levantó la humilde y bella ermita para la Virgencita.
“Yo padecía de epilepsia y la Virgen me salvó, por eso tenía que venir este año a cumplir lo prometido”, manifestó con un llanto que brotó cuando sus ojos cubiertos por un pañuelo, vieron a la imagen de la Virgen.
Este es el inicio de la celebración religiosa que todo Occidente brinda a la Virgen María desde el 22 de noviembre hasta el 8 de diciembre, que es el día que la Iglesia Católica dedica a su celebración.
La Virgen del Hato entrará este domingo al mediodía a El Viejo, precisamente cuando en ese sitio se preparan para la víspera del novenario a la Virgen del Trono, patrona de los nicaragüenses.