María Antonia López [email protected]
La pequeña industria de candela artesanal es muy incipiente, solamente tres microempresas existen en el país.
Alicia Zamora, artista plástica y copropietaria de la fábrica de candelas artesanales “Curiosidades Mon Amí” sostiene que lo más importante del desarrollo de este tipo de actividad es la posibilidad de que el país cuente con una serie de talleres que generen empleos.
“Nosotros somos apenas dos personas (su padre y ella), de esa manera nos afiliamos al Instituto de la Pequeña y Mediana Empresa (Inpyme), recibimos un curso de capacitación y el requisito básico era tener calidad, que fuera artesanal y de características regionales, con eso hemos participado en varias ferias y hemos tenido aceptación”.
La calidad que aportan a estas velas es en presentación, color, olor, que no sea solamente una masa de parafina sino que estén bien empacadas y con fragancias agradables.
Ambos instalaron un pequeño taller donde fabrican las velas artesanales a base de hielo, arena, aromáticas, con formas de frutas y para lograrlo han viajado a Miami y México para mantenerse actualizados con la técnica.
La intención de estos microempresarios es ampliar el conocimiento y para ello es que se han dedicado a impartir talleres, “para que la gente aprenda el proceso manual de su elaboración y valoren, que es mejor la hecha a mano, ya que llevan impregnadas las vibraciones de la persona que las elabora”, indicó Zamora.
Para fabricar una candela artesanal se necesitan al menos dos días para darle el acabado final.