Aunque el parque se resiste a morir como lugar romántico, poco a poco otros sitios adquieren importancia entre los jóvenes
Por lo general esta cita queda amarrada desde la hora del receso de clases. Al llegar la hora de salida lo primero que hacen es buscarse para llegar juntos al lugar señalado. El parque, ese lugar cuyo romanticismo se resiste a morir, está contiguo al colegio “Alfonso Cortés”, es el sitio donde hablarán y se darán todos los besos que no son permitido dentro del instituto.
Por eso el no irse a su casa y quedarse “jalando” como lo hace Karla (17), cuyo padre considera que no tiene edad para enamorarse, es un riesgo tremendo para estas parejas que aún consideran el parque como el lugar adecuado para estar juntos y platicar sin que nadie los moleste.
Es un riesgo que ambos lo entienden como “muestra de amor”. “La conocí en clases, y me costó mucho declararle mi amor porque éramos amigos y ella tenía novio, pero ya tenemos dos años de ser novios, y en tiempo de clases siempre venimos aquí”, dice Iván, el novio de Karla.
Por eso es que en las tardes, parques como Las Piedrecitas, el de Valle Dorado, y el de Las Madres, son uno de esos típicos rinconcitos donde se encuentran una pareja en cada banca, en un chino, en un “sube y baja” y en cada esquina posible.
“El parque nunca dejará de ser un lugar para citarse. Aquí nadie nos molesta, puede ser que lo vean un poco ridículo, pero es bonito, te relajas y está cercano de nosotros”, opina Jessica Michelle (17).
Otros lugares para el amor
Sin embargo hay quienes consideran que es feo y poco usual irse a una banca del parque a platicar y darse un beso, y consideran el parque como el lugar donde se juega béisbol o básquet, también podés patinar, andar en bicicleta. “Los cuadros se hacen en tu casa, es feo que todo el mundo te esté viendo y criticando por estar en una sola en el parque, yo pienso en mi novia, yo soy hombre y nada pierdo”, dice Ramón Pichardo (19).
Los miradores es otro de esos rinconcitos donde los enamorados se van a estar unas horas para estar tranquilos fuera del bullicio de la ciudad. Es salirse de toda rutina, disfrutar del airecito helado típico de la zona, ver toda Managua y observar el cielo bien estrellado es lo que deleita a los jóvenes después de la compañía.
“El mirador de Carretera Sur nos encanta. Allí nadie está pendiente de vos, no es peligroso como otros lugares”, agrega Samanta Woo (22) quien dice ir al menos dos veces al mes al mirador a platicar con su novio Jeison.
Como estos sitios hay varios, los más conocidos y frecuentados son el de Villa Fontana, Carretera Sur, Las Nubes en El Crucero, entre otros.
Pero ahora hay sitios como Metrocentro y Plaza Inter donde se te va el tiempo con tu media naranja. Puedes comer, ir al cine, ir de compra y todo en el mismo lugar.
“Yo creo que esos lugares no son adecuados para enamorados, hay mucha gente, mucha bulla, a veces ni comer podes de tanta gente que hay”, añade Yara.
Sin embargo hay parejas que religiosamente van todos los fines de semana a este tipo de lugares ya que tienen todo al alcance y es céntrico en la capital.
El lugar de donde suelen salir muchas parejas, como las discotecas, son sitios que se acostumbra a ir en grupos. “Ahí es donde se hacen los amarres, pero no para ir dos enamorados”, opina Yader Pasquier (24).
Pero sea cuál sea el sitio, estés de bajo de un palo o en el palacio más hermoso del mundo, estarás igual de feliz si estas con esa persona adecuada y especial que llena tu corazón.