He quedado sorprendido con la carta que me han enviado los señores de Andiprofa, fechada el 15 de febrero, en la que aseguran que no han interpuesto ninguna denuncia ante la Contraloría General de la República (CGR) contra los procesos de licitación en el Ministerio de Salud (Minsa).
Al respecto no me queda más que decirles que su misiva denota falta de seriedad de su parte, y temor a asumir que efectivamente enviaron una carta al Presidente de la Contraloría colegiada, Guillermo Argüello Poessy, señalando irregularidades en el proceso de licitación de medicamentos, materiales de reposición periódica, equipos y otros.
El contenido de esa carta se traduce en una denuncia ante el ente fiscalizador que incluso han ordenado una investigación sobre la licitación Número 3203-2000 en el Ministerio de Salud.
¿O es que acaso los señalamientos que los de Andiprofa hicieron en su carta eran “cuechos” sólo para excitar la curiosidad de los contralores colegiados.
Lo más sorprendente es que enviaron copias de la carta en la que supuestamente me “desmienten” al Contralor Argüello y al mismo Ministerio de Salud, para hacerme quedar como mentiroso, frente a estas instancias.
Seguramente los contralores colegiados compartirán conmigo que la CGR no es una oficina de recepción de “cuechos” o “cuentos”, de quienes sienten lesionados sus intereses económicos, prueba de ello es la carta que les ha enviado el Dr. Argüello Poessy, ratificando que los hechos denunciados que competen a la licitación pública número 32, serán investigados; carta que se puede leer también en esta misma edición de LA PRENSA.
Jorge Loáisiga Mayorga
Redactor de LA PRENSA