Cuando LA PRENSA (edición del 16 de febrero) se refiere a la Reina Sofía de España, le da el tratamiento de “Alteza”, lo cual es un error. El tratamiento a los reyes y reinas es de “Majestad”.
A los príncipes y princesas, hijos de los reyes, se les trata de Altezas Reales.
Al Emperador del Japón, el único emperador que queda sobre la Tierra, tiene el tratamiento de Majestad Imperial y sus hijos, el de Altezas Imperiales.
Otra equivocación en la nota de LA PRENSA, es donde dice: “La Reina Sofía I de España”. Esto sería si la Reina, como la de Inglaterra, ciñera la corona. En el caso de doña Sofía, como en los demás reinos de Europa, la Reina es la esposa del Rey, sin ningún cargo oficial (Arto. 58 de la Constitución española).
En otro pasaje la nota dice: “La Reina Sofía de España visitó Nicaragua en 1991 en compañía de su esposo el Rey Juan Carlos”. Cuando los Reyes viajan juntos, la Reina acompaña al Rey y no al revés.
Tal vez sirvan para algo estas observaciones.
Mario Alfaro Alvarado.