Quiero referirme al contenido y titular de la noticia de primera plana sobre el trabajo infantil, del 18 de febrero de 2001, “Niños Esclavizados”. Desde que la periodista Gabriela Roa me llamó para pedir la entrevista y referirse al trabajo en 24 fincas cafetaleras de Matagalpa y Jinotega, le expresé que se la daría con el ánimo de resaltar el interesante proceso que se está iniciando con el apoyo de los cafetaleros y no para buscar culpables. Le expliqué que el problema del trabajo infantil en general y sobre todo en el sector cafetalero, no se debía a una sola causa y que es una tradición que sumada a la pobreza y a otros factores culturales y sociales, ha impedido ver las consecuencias negativas que esto trae a los niños y niñas.
El mayor énfasis de mi entrevista estuvo alrededor de lo que se quería lograr de la actitud positiva de las Asociaciones de Cafetaleros de Matagalpa y Jinotega y conté algunas acciones concretas de cafetaleros, que ya antes de iniciar el proyecto, están realizando para revertir la situación que se reflejó en la Línea de Base preparada por la UCA.
Yo esperaba un texto constructivo, que sumara actores al esfuerzo que se está iniciando y no que restara. Me parece que ya es hora que los diarios nicaragüenses alejen el amarillismo de las noticias que tienen que ver con los niños, las niñas y sus familias. Es verdad que es importante poner el tema del trabajo infantil en el espacio público y que muchos datos que surgieron de la Línea de Base son dramáticos y que representan una violación histórica de los derechos de los niños y las niñas, pero también es verdad que si esa noticia no es adecuadamente presentada con un enfoque educativo y constructivo, no abona al proceso de movilización social en el que todos los sectores deben estar involucrados.
Es por eso que les solicito, aunque realmente debería estar exigiendo, que se publique esta carta y la otra parte de mi entrevista, la parte constructiva, que está acompañando en Nicaragua la formación de una amplia alianza que permita enfrentar de manera efectiva el problema del trabajo infantil. Pido a la misma periodista, Licda. Gabriela Roa, que utilice toda la información y que al escribir el siguiente artículo recuerde algunas recomendaciones que me permití hacerle. Por ejemplo, el título de la noticia, yo le proponía: Avanza proceso de erradicación del Trabajo Infantil en el sector cafetalero.
Espero que la respuesta a mi petición sea pronta y si es posible se puede ir a entrevistar a los cafetaleros de Matagalpa y Jinotega y constatar el entusiasmo con el que ellos están trabajando en un proceso de más de un año, tiempo que ha durado la preparación y gestión del Programa de Acción apoyado por el IPEC. Por ahora siento que mi información fue utilizada con otros intereses y otros fines contrarios a lo acordado.
Bertha Rosa Guerra G.
Coordinadora Nacional
OIT Programa IPEC.
Nota del Editor
En realidad, en su extensa carta que publicamos con ligeras modificaciones de redacción, la señora Guerra no refuta ni rectifica la información que fue basada en los datos que ella misma proporcionó. Al parecer la señora Guerra esperaba un publirreportaje en el que hasta el título de la nota informativa se permitió indicar. Y en cuanto a los supuestos culpables de la situación que sufren los niños trabajadores fue el Procurador de la Niñez y la Adolescencia, Carlos Emilio López, quien “responsabilizó de esta explotación infantil a empresarios, medianos y grandes productores…”
El Editor.