Virna…
tiene nombre de mar
el océano que separa tu ausencia de mí
¿Y si fuera un sueño
que cada noche pudiera cruzarse
para que tus ojos se encontraran con los míos?
No sé, tal vez con soñar
Oh, corazón mío,
rasga el mar y el viento
y llega hasta Virna
que ella suspire mi aliento
y me tienda, por siempre
su mano amiga.
Fernando Alonso Barahona