Leonel A. Marín McEwan*
Se entiende por agroindustria a una empresa que elabora o procesa materias primas agrícolas, entre ellas los cultivos superficiales, arbóreos y los productos ganaderos. La agroindustria contribuye en grado significativo al desarrollo económico de Nicaragua.
En primer lugar, las agroindustrias son el medio principal de un país netamente agrícola como Nicaragua, que transforman productos agropecuarios en bruto en productos terminados de consumo. En segundo lugar, los productos agroindustriales constituyen la fuente principal de exportaciones de un país. Y, en tercer lugar, el sistema agroalimentario proporciona al país los elementos nutritivos indispensables para el bienestar de toda la población.
Una planta elaboradora o procesadora puede ofrecer al agricultor oportunidades de nuevos cultivos y, en consecuencia, elevar el nivel de ingresos para la explotación agrícola. Cabe señalar que el proceso de la industrialización en el área rural puede influir en grado considerable en la importancia y continuidad del estímulo proporcionado por las agroindustrias a la promoción y el desarrollo de las comunidades rurales. La demanda y la necesidad de servicios de elaboración y procesamiento aumentan a medida que se incrementa la producción agrícola.
En los programas de desarrollo regional, las agroindustrias han servido de justificación económica para llevar a cabo obras de infraestructura rural, como caminos de penetración, instalaciones eléctricas y telefónicas y servicios de riego. También pueden servir de centros de convergencia económica para las cooperativas de pequeños y medianos productores y actividades relacionadas al desarrollo de la comunidad. Con frecuencia no se comprende plenamente la importancia de las agroindustrias en el sector manufacturero en los países en vías de desarrollo. La elaboración de productos alimentarios y de fibras vegetales constituye la cimentación de la base industrial de la mayoría de los países. En Centroamérica, por ejemplo, las agroindustrias representaron en 1971 el 78 por ciento de la producción del sector manufacturero de Nicaragua. Otro exponente más de la importancia que tienen las agroindustrias en el sector manufacturero es su capacidad para crear puestos de trabajo. Una gran parte del sector comercial se ocupa en la distribución de productos agroindustriales. La agricultura constituye el recurso natural más importante de Nicaragua. Existe una demanda internacional para los productos agropecuarios con oportunidades para el incremento de nuestras exportaciones constituyéndose en fuente de divisas. Las agroindustrias orientadas a la exportación tienden a incrementar el porcentaje interno del valor agregado al aumentar el grado de elaboración de las materias primas.
Por ejemplo, cuando las reses de ganado vacuno en canal se transforman en porciones cortadas y empacadas, y los granos de café, en tostado y molido o soluble. Esto no sólo aumenta el valor agregado, sino que también da como resultado la diversificación de productos, que tienen una mayor elasticidad con respecto al ingreso y se mantienen menos afectados por las fluctuaciones de los precios de los productos básicos con menos grado de elaboración. Haciendo un poco de historia de nuestro país, en 1960, los productos de algodón representaron el 27 por ciento de las exportaciones totales; para el año 1965, el “oro blanco” había aumentado y representó el 51 por ciento de las exportaciones totales del país, pero cinco años más tarde la proporción de dichos productos había disminuido en un 50 por ciento. En el transcurso del mismo decenio, el valor de las exportaciones de productos elaborados de carne vacuna se elevó de US$3 millones (5 por ciento de las exportaciones) a US$27 millones (15 por ciento de las exportaciones), contrarrestando así en gran parte el descenso registrado en las exportaciones de algodón.
Actualmente los propietarios e inversionistas de empresas agroindustriales muestran preocupación por el rendimiento de sus inversiones y la rentabilidad debido a los siguientes factores:
1. Constante deslizamiento de la moneda. 2. alto impuesto de importación de insumos y equipos. 3. Altas tasas de interés bancario. 4. Baja en los precios internacionales de productos agropecuarios. 5. Falta de asistencia técnica al agricultor. 6. Falta de políticas económicas que incentiven al agricultor. 7. Falta de financiamiento adecuado al pequeño y mediano agricultor.
Es necesario efectuar un análisis económico, que proporcionará a quienes formulan las políticas públicas, un medio de clasificar los proyectos de acuerdo con sus costos y beneficios sociales. Esa evaluación es necesaria a fin de maximizar el aprovechamiento de los escasos recursos de capital con miras a lograr los objetivos de desarrollo del país.
Finalmente, el futuro gobierno de Nicaragua debe facilitar el desarrollo de las agroindustrias de procesamiento y elaboración de costo competitivo que utilizan abundantes materias primas locales. También, la nueva política monetaria del nuevo gobierno puede determinar las tasas de interés y la disponibilidad crediticia para ciertos tipos de proyectos y, por consiguiente, movilizar recursos hacia agroindustrias de distintos tipos, tamaños y ubicaciones.
* Agricultor. Postgrado Administración de Empresas.