- “Es un pequeño país de m…”, habría dicho diplomático galo
Henri Mamarbachi (AFP)
PARIS.- Franceses e israelíes se esforzaban este jueves para evitar un incidente diplomático después de las polémicas declaraciones sobre el Estado hebreo del embajador de Francia en Londres.
De momento el asunto no suscitó ninguna protesta oficial, probablemente por el carácter “privado” de las declaraciones del embajador Daniel Bernard.
Esta aparente voluntad de calma está sin duda vinculada al deseo de no crear un nuevo contencioso entre esos dos países que desde hace décadas mantienen relaciones difíciles.
Al ser interrogado, el Ministerio francés de Relaciones Exteriores señaló este jueves que “no había sido objeto de ninguna diligencia sobre ese tema”.
El embajador de Francia en Londres, Daniel Bernard, desmintió el miércoles haber calificado a Israel de “un pequeño país de mierda” (“shitty little country” en el texto), durante una conversación privada, estimando que sus declaraciones divulgadas por un diario británico fueron “completamente tergiversadas”.
No obstante, reconoció que se había “expresado de manera un poco ligera”.
El periódico Daily Telegraph (derecha) afirmó el lunes que “el embajador de un país importante de la Unión Europea” había utilizado esa expresión y el Times citó el miércoles a Daniel Bernard como autor presunto de esa declaración.
“Quizás me expresé un poco a la ligera, pero la idea no era insultar a un país, por supuesto, y ciertamente no a Israel, era simplemente decir que se está frente a un problema muy complicado que no se consigue resolver y que todo ello sucede en un pequeño perímetro tan grande como tres departamentos franceses”, declaró el embajador a la AFP.
Las declaraciones de Daniel Bernard (60 años) fueron realizadas, según el Daily Telegraph, la semana pasada durante una cena organizada por Conrad Black, el propietario canadiense del periódico británico Daily Telegraph y del israelí Jerusalem Post.
Sus palabras fueron retomadas el lunes por la esposa de Black, Bárbara Amiel, que publica artículos en ese diario.
De momento, las autoridades israelíes no reaccionaron oficialmente.
“Si el embajador de Francia en Londres realizó esas declaraciones se trata de antisemitismo, y no sería digno del representante de un gran país realizar declaraciones medievales”, declaró a la AFP Raanan Gissin, portavoz del primer ministro Ariel Sharon.
Sin embargo, precisó que no reaccionaba a nivel oficial ya que compete hacerlo al Ministerio israelí de Relaciones Exteriores una vez que haya “verificado el asunto”.