Ricardo Silva [email protected]
Los escritos de León Núñez en el libro “El síndrome del figureo”, de la política en Nicaragua, no han perdido vigencia. Han comenzado a aparecer unos casos que muestran que desafortunadamente hacen ver que hay gente que no aprende y que siempre está propensa a caer en ciertas actitudes como las que describe y sobre las que advierte don León.
Tres ejemplos de estos casos:
1.- La señora Castro de la DGI. Observamos ¡qué necesidad con la que llegó!, ni Byron Jerez en su momento llegó a tanto en tan poco tiempo. Esta señora se merecía algo más que un llamado de atención.
2.- El señor Pedro Solórzano. Dando muestras de nepotismo al nombrar a una prima como asistente.
3.- Los de la junta directiva (no recuerdo si fue de Enel o Enacal), que recibieron sus dietas “porque aquí no ha llegado ninguna comunicación oficial”, cuando todo el pueblo lo había visto y oído por todos los medios.