AP
JERUSALÉN.- Tres milicianos palestinos y cuatro israelíes murieron en diversos atentados, al tiempo que el dirigente palestino Yasser Arafat elogió un proyecto por el cual el mundo árabe haría las paces con Israel a cambio de su retiro total de Gaza, Cisjordania y Jerusalén oriental.
En Gaza, el ejército israelí dijo que rechazó un intento de dos palestinos armados de infiltrarse en un asentamiento judío. Fuentes palestinas dijeron que uno de los milicianos murió.
Horas antes, palestinos abrieron fuego sobre un vehículo israelí cerca del cruce de Kissufim al anochecer y luego un miliciano se mató al denotar una bomba. Funcionarios israelíes dijeron que también murieron tres israelíes y cuatro personas sufrieron heridas.
Las brigadas Al Aqsa, vinculadas con el grupo Fata de Arafat, se declararon responsables del ataque en Gaza en un llamado a The Associated Press e identificaron al miliciano como Mohammed Kasser, de 22 años, vecino de Ciudad Gaza.
Después del ataque, tanques israelíes dispararon sobre casas en la vecina ciudad palestina de Dir al-Balah, con un saldo de cuatro heridos, dijeron fuentes palestinas. Israel no hizo declaraciones sobre este hecho.
Previamente, la policía advirtió un auto sospechoso y lo detuvo en la carretera entre Jerusalén y el Valle del Jordán, en Cisjordania. El jefe de policía, Shahar Ayalon, dijo que el conductor salió del auto y cuando los policías “desenfundaron sus armas, detonó la bomba por control remoto”.
Murieron el asaltante y un policía, y otro sufrió heridas leves. Al Aqsa se declaró responsable.
Israel culpó a Arafat por la violencia. “Se ha convertido en un suceso cotidiano”, dijo Arie Mekel, vocero de la Cancillería. “Sin duda, vemos una escalada planificada por la Autoridad Palestina y Arafat”.