- Medida pretende garantizar mayores niveles de calidad en los productos elaborados a base del “grano de oro”
Gabriel SánchezEspecial para LA [email protected]
La Organización Internacional del Café (OIC), pretende que a partir del primero de octubre se desechen los granos de mala calidad que la industria utiliza para el procesamiento de subproductos.
Además esta medida exigirá etiquetar el producto que se vende para determinar la calidad del café a consumir, sin embargo los perjudicados serán las industrias de café que procesan el residuo de cafés de menor calidad para sus mezclas.
La iniciativa es promovida por el Programa de Calidad de la OIC con el objetivo de fomentar la calidad de café.
LA PRENSA intentó obtener la opinión de la empresa Café Soluble S.A., principal procesadora de café en Nicaragua, pero será hasta hoy que brindarán declaraciones al respecto.
La medida establecida fue anunciada por Roberto Bendaña, viceministro Agropecuario y Forestal, quien consideró que con esta disposición el consumo del mercado será mayor.
“Pretendemos restringir el uso del desecho del café que sólo perjudica la calidad. Se van a eliminar toda esa cantidad de desechos, que es considerada como café y que al final no lo es. El beneficiado será el consumidor que no tendrá un café de mal sabor en su mesa y por lo tanto el consumo puede aumentar por las diferencias de sabor”, comentó Bendaña, quien participó en el Congreso de Café, “Competitividad de la semilla a la taza”, realizado en Guatemala.
La iniciativa forma parte de las soluciones que el sector cafetalero centroamericano pretende impulsar para superar la crisis provocada por la caída del precio internacional.
Por su parte Amílcar Navarro, presidente de la Unión Nicaragüense de Cafetaleros (Unicafé), cree que la medida conllevará a un mejor control de la calidad del café que se produce dentro y fuera del país “porque se tendrá que certificar el café y se sabrá qué tipo de café llega a los consumidores, así no están vendiendo gato por liebre”.
Navarro agregó que con la no comercialización de los desechos, que incluyen grano negro y café fermentado, disminuirá la entrada de enfermedades de este cultivo provenientes de otros países.
José Ángel Buitrago, presidente de la Asociación Nicaragüense de Exportadores de Café (Excan), consideró que lo más difícil podría ser la adaptación a una nueva forma de procesamiento de café, lo que puede traducirse en un producto más caro para los consumidores.
“El problema sería que esta disposición fuera sólo aplicada a Café Soluble de Nicaragua, que es la industria que mezcla diferentes tipos de café para vender su producto, pero ojalá sea igual en todos los países de la región”, comentó Buitrago.