Luis Alemán Saballos [email protected]
La relativa calma que se vivía en el Hospital Fernando Vélez Paiz fue alterada ayer por un adolescente, quien desesperado tras conocer el diagnóstico negativo sobre la enfermedad que padece su tierno hijo, tomó un cuchillo e intentó agredir a su compañera de vida, con quien no se puso de acuerdo sobre el traslado del pequeño al Hospital La Mascota.
El muchacho, de 17 años, llegó al hospital a las 8:30 a.m., de ayer martes y se dirigió a la sala donde se encontraba internado su pequeño niño de 11 meses, quien llegó con problemas de diarrea.
Los médicos le informaron que el pequeño sería trasladado al Hospital La Mascota, donde se le practicarían unos exámenes, debido a que le descubrieron unos ganglios y existía la sospecha de que fuera un problema oncológico.
Al parecer, la información de su traslado a otro hospital, alteró al joven padre, quien reclamó a su compañera de vida y le gritó que no dejaría que su niño fuera trasladado a La Mascota, debido a que en ese hospital, tiempo atrás, se le había muerto una hija.
El incidente alteró la normalidad del hospital y personal de trabajo social intentó interceder en el hecho, pero a los minutos fueron informados por unas señoras que cuidan a sus hijos en la misma sala que el muchacho estaba armado con un cuchillo y que amenazaba con agredir a su compañera de vida.
Carlos Aguilar Obando, vigilante del hospital, llegó a la sala de misceláneos e intentó persuadir al muchacho, quien estaba alterado, pero poco después comenzó a llorar y a pedir disculpas por lo que había hecho.
“Él estaba llorando y decía que no quería que trasladaran a su hijo a La Mascota, me dijo que había cometido una caballada y luego me entregó el cuchillo”, relató el vigilante, quien después entregó el arma a unos oficiales de Policía que fueron llamados ante la emergencia, pero que no detuvieron al joven porque éste era un adolescente.
El doctor Julio Flores Martínez, director del Hospital Fernando Vélez Paiz, confirmó el incidente y aseguró que el joven intentó agredir a su propia compañera de vida porque no se ponían de acuerdo ante el posible traslado del niño.