En la armonía de la noche pienso en llevarme tuamor al llegar al místico dominio por mí no habitadode tu corazón llegar como abeja a los pétalos de una hermosaflor para quien bajo el sublime sol, robar su dulzuraen sorbos no es ilusión. Envidio el garrido que siempre te acariciaal llegar a tus labios en forma de brisaviento a quien hago un desafío consciente;mis palabras temblorosas de aquel refugio logransalir igual que las tuyas cuando algo me quieres deciralegoría del sentir que a ti me ata,oriflama del corazón que al fin se alzasumergiéndome en abismo del inconscienteen un tiempo no muy lejano después de éstedonde domina lo que mi corazón siente. Otra estancia, otro momento,en otro espacio, otro tiempo.los rumores de una duda, risas;los dos juntos, conmoción, caricias.Del tímido silenciodos palabras “te quiero”,reflejo que del amor rápidamente escapay que ellas propician y que el amor prontoencarna.