Amparo Aguilera
La próxima semana los obreros y empleadores de la construcción volverán a compartir mesa, aunque aseguran que no es precisamente para negociar acerca de la falta de acuerdos entre las partes.
Ayer el presidente de la República, Enrique Bolaños, confirmó que recibirá a ambas partes, en Casa Presidencial, para abordar el conflicto que ya amenaza con huelga nacional.
Aunque no dio detalles de cuál sería, en todo caso, su aporte para “amainar” la tensión y conducir a arreglos entre ambos sectores que no logran ponerse de acuerdo en torno al incremento o mantenimiento salarial.
Según Lindolfo Monjarrez, vocero de la Presidencia, en el encuentro participarán tanto los líderes sindicales de la construcción, como la parte empleadora.
Aunque Virgilio Gurdián, titular del Ministerio del Trabajo (Mitrab), confirmó que se sumará a la reunión junto al titular del Ministerio de Transporte e Infraestructura (MTI), Pedro Solórzano.
INFLEXIBLES
Según Gurdián, básicamente se tratará de un encuentro de “cortesía” y de “acercamiento”.
Para luego efectuar en agosto la última negociación, entre las partes, bajo la figura del Tribunal de Huelga.
Pese a que días atrás había asegurado que ésta se materializaría en la última semana de julio.
En este sentido Luis Barbosa, representante de los obreros, dijo que en todo caso, esto no influirá en la posición de los trabajadores.
“No hay problema porque nosotros mantendremos la demanda del incremento salarial del 100 por ciento en los dos encuentros”, señaló.
Mientras tanto, Alejandro Terán, presidente de la Cámara Nicaragüense de la Construcción (CNC), dijo que tampoco cambiarán de opinión.
“Nosotros vamos a solicitarle al presidente, que a como está el sector no es posible reajustar más el salario, y vamos a detallarle, en este sentido, nuestra situación”, adelantó Terán.
FUERZAN A ARREGLO Virgilio Gurdián, titular del Trabajo, admitió que agotarán todas las vías posibles, para que obreros y empleadores de la construcción lleguen a acuerdos previos a la última negociación bajo la figura del Tribunal de Huelga. “Por eso le estamos dando suficiente tiempo”, justificó.