- Dirigida por el peruano Luis Llosa
La historia del dictador dominicano Rafael Leonidas Trujillo, contenida en la novela La Fiesta del Chivo, del peruano Mario Vargas Llosa, y que fuese convertida en filme, se estrenó ayer en Lima con la presencia del escritor y de Isabella Rossellini, la actriz protagonista.
La obra, dirigida por el peruano Luis Llosa, se exhibió para la prensa y la crítica coincidiendo con el cumpleaños 70 del escritor Mario Vargas Llosa, quien se encontraba como invitado especial, y la presencia de cuatro actores de la película.
Además de Rossellini —quien interpreta a Urania Cabral, la hija de quien fuera mano derecha de Trujillo—, acompañaban al escritor y al director, Tomás Milian (quien encarna al dictador), Stephanie Leonidas (Urania joven) y Steve Bauer (Almirante Viñas).
La Fiesta del Chivo narra la época oscura que vivió República Dominicana de 1930 a 1961, cuando Trujillo encabezó una de las más sangrientas tiranías de Latinoamérica.
El director de la película dijo en rueda de prensa que la obra se inicia cuando Urania regresa a Santo Domingo para visitar a su viejo y enfermo padre, Agustín Cabral “Cerebrito”, uno de los ministros sumisos de Trujillo.
“Allí (en Santo Domingo) afloran sus más íntimos recuerdos, su pasado, sus secretos, la conspiración y el asesinato del dictador, además del hombre (Trujillo) que la marcó para siempre al violarla cuando aún era una jovencita”, señaló.
Llosa, familiar del escritor peruano, dijo que decidió rodar la película cuando estaba leyendo la novela. “Lo tuve tan claro que todavía sin haber terminado de leerla me lancé a conseguir los derechos de la novela”.
Vargas Llosa se mostró satisfecho, indicando que otros directores llevaron algunos de sus libros al cine, como Pantaleón y las Visitadoras, y La Ciudad y los Perros, pero “ninguno ha enfocado tan bien el espíritu de la novela”.
El escritor advirtió que las democracias, por más imperfectas que sean, se deben defender ante una dictadura de la misma magnitud que la de Trujillo o de otra forma, “pero dictadura a fin al cabo”.
Rossellini, quien se declaró admiradora de Vargas Llosa, habló de su entusiasmo cuando le llegó el guión. “Simplemente me encantó y el personaje”, dijo.
Para interpretar a Urania, una mujer llena de dolor que de muy joven fue entregada por su padre al dictador para ser violada por éste, Rossellini leyó tres veces el libro y unas veinte el guión, y empezó a escribir en un diario todas sus emociones a fin de trabajar el personaje.