Desde niño Clint Eastwood vio una buena cantidad de películas de guerra. Más tarde llegó a protagonizar algunas, pero ahora le está dando los toques finales a un par de películas sobre la sangrienta batalla de Iwo Jima, de la Segunda Guerra Mundial y que asegura que tienen diferentes perspectivas.
“Siempre han sido vistas desde un solo lado. Los buenos siempre estaban en un solo bando, pero la vida no es así”, señaló el actor y director fílmico, de 75 años, en una conferencia de prensa celebrada el viernes.
Por ello, para poder cubrir las dos versiones, Eastwood se pasó el último año trabajando en dos películas.
La primera, titulada Flags of Our Fathers, da seguimiento a los soldados estadounidenses que alcanzaron fama al ser fotografiados cuando elevaban una bandera estadounidense en Iwo Jima.
La segunda, que se filmó en japonés y con un elenco mayoritariamente japonés, se enfoca en el general que perdió la batalla y los jóvenes soldados que murieron bajo sus órdenes.
“Considero que esos soldados merecen una buena cantidad de respeto. Me siento terrible por ambas partes en esa guerra, así como en todas las guerras (pues) mucha gente inocente es sacrificada”, dijo Eastwood.
Por ello, Flags of Our Fathers, basada en la novela de gran éxito de librerías de James Bradley, será estrenada en agosto, y Red Sun, Black Sand, que protagoniza Ken Watanabe, debutará en diciembre.