Britney Spears casi cae frente a un hotel de Manhattan y casi arroja al piso a su hijo de ocho meses.
En fotos publicadas ayer en la primera página y en el interior del diario New York Post, la estrella del pop, de 24 años, aparece saliendo del hotel Ritz-Carlton con Sean Preston en un brazo y un vaso en la otra mano.
Mientras sus guardaespaldas la acompañaban hacia su automóvil, la cantante tropezó y se inclinó hacia abajo —al parecer sus largos pantalones se enredaron con sus sandalias— y se le cayó su sombrero anaranjado.
Spears, sin embargo, pudo mantener el equilibrio y mantuvo en sus brazos a su hijo, con la ayuda de un guardaespaldas, que reaccionó rápidamente.
Una llamada al publicista de Spears para que efectuara declaraciones ayer no fue respondida de manera inmediata.
ÚLTIMO INCIDENTE
Se trata del incidente público más reciente que involucra la seguridad del niño de Spears.
A comienzos de esta semana fue fotografiada manejando con Sean Preston en su silla para bebés mirando hacia adelante y no hacia atrás, como exigen las normativas para resguardar la seguridad de niños de su edad.