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(LA PRENSA/ U. MOLINA)

Carmen, la verdadera

María Carrasco es la “bailaora” que da vida a Carmen, el personaje principal de esta obra de danza flamenca que ha recorrido varios escenarios [doap_box title=”Una “bailaora” de tiempo completo” box_color=”#336699″ class=”archivo-aside”] Posee una trayectoria sólida en la danza y el teatro. Sus inicios. Debutó en 1989 como profesional en el Teatro Alcázar de Madrid […]

  • María Carrasco es la “bailaora” que da vida a Carmen, el personaje principal de esta obra de danza flamenca que ha recorrido varios escenarios
[doap_box title=”Una “bailaora” de tiempo completo” box_color=”#336699″ class=”archivo-aside”]

Posee una trayectoria sólida en la danza y el teatro.

Sus inicios. Debutó en 1989 como profesional en el Teatro Alcázar de Madrid y trabajó como primera bailarina para diversas compañías de danza.

Cinco espectáculos. Con su compañía montó Embrujo, Al Compás de la Palabra, Tiempos Flamencos, Carmen y Aires Flamencos.

Giras mundiales. Ha recorrido países como Japón, Guatemala, El Salvador, Corea del Sur, Líbano, Jordania, Estados Unidos, Francia, México, Cuba, Polonia, entre otros.

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Como parte de una gira por Centroamérica promovida por Espectáculos Candilejas S.L., se presentó por primera vez en Nicaragua la compañía española Ballet Flamenco, de María Carrasco. Tuvimos la oportunidad de platicar con Carrasco y esto nos contó.

“Tenía muchas ganas de venir a Nicaragua. Me impactó porque la gente es respetuosa, amable, servicial, te hacen sentir como una verdadera estrella y, sobre todo, captaron la sensibilidad de mi espectáculo”, expresa la destacada empresaria.

María es una mujer que tiene múltiples responsabilidades, es la propietaria de la compañía, directora artística, coreógrafa y primera bailarina. Su éxito está vinculado a la innovación, alta feminidad en los movimientos de las “bailaoras” y un increíble dominio poético del cuerpo.

La pasión de Carrasco por el baile se inicia a los cuatro años, cuando sus padres la inscriben en la escuela de danza del colegio. Con doce años, ingresa al Real Conservatorio de Madrid para estudiar Danza Española. Amplió estos estudios con ballet clásico, contemporáneo, jazz, tap y otras materias en Estados Unidos e Italia.

Prueba de los innumerables éxitos que ha cosechado es que su obra magistral Carmen, fue finalista como mejor espectáculo de danza y mejor intérprete femenina en la VII edición de los Premios Max de las Artes Escénicas, el mayor reconocimiento para los profesionales del teatro y la danza de España. “Fue un subidón, un orgullo para mí y para Carmen, ya que al fin, la gente logró entender a esta mujer incomprendida en su época”, afirma la artista.

Tanto en su faceta de “bailaora” como de coreógrafa ha dejado impresa su fuerte personalidad. Se describe a sí misma como una persona muy tenaz, creativa, intuitiva, perseguidora de los sueños hasta el final, poco diplomática a veces y cree en la justicia por encima de todo.

Literalmente su vida entera es la danza y el teatro por lo que no le queda mucho tiempo para su vida personal. “Muchas veces, cuando la situación es muy dura, pienso que podría haber hecho otra cosa. Pero cuando acaba una gira, ya estoy esperando que venga la siguiente. Es como una droga”.

Su mayor meta es alcanzar reconocimiento y respeto cada vez mayor con la compañía. Su consejo es intentar conseguir nuestros sueños a pesar de todo y de todos, “porque aunque no los consigamos, siempre vamos a encontrar en el camino, cosas que nos van a satisfacer”.

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