- Consejos ciudadanos crean desconfianza entre algunos diputados que ven en ellos réplicas de instancias similares en Cuba y Venezuela
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La bancada de la Alianza Liberal Nicaragüense (ALN) anunció ayer que propondrán la eliminación de los poderosos consejos que pretende crear el Poder Ejecutivo, en la discusión de las reformas a la Ley 290, de organización del Estado, que está programada para hoy.
El diputado Eduardo Montealegre señaló ayer que la ALN también analizaba la posibilidad de que en vez de “consejos”, lo que exista sean “comisiones”, y por otro lado que la creación de esas entidades requiera de una ratificación del parlamento.
“No hay necesidad de crear esos consejos, pueden hacer comisiones de apoyo, porque un consejo o una secretaría no puede estar encima de un ministerio”, dijo Montealegre.
El parlamento nicaragüense espera discutir hoy una reforma a la Ley 290, que el presidente Daniel Ortega envió con carácter de urgencia la semana pasada.
Desconfianza
La iniciativa presidencial provocó desconfianza debido a la concentración de poder que aparentemente busca Ortega, también porque resta facultades a los ministerios de Gobernación y Defensa y porque brindaría al Poder Ejecutivo la potestad de crear mediante decretos una serie de consejos y secretarías, que diputados de oposición califican como “supraministerios”.
“El presidente Ortega fue muy claro de que estos consejos no tienen nada que ver con los consejos populares de Cuba y Venezuela, pero al leer lo que aparece en el decreto, se ve que las atribuciones y responsabilidades que se les dan a esos consejos son bastantes extensas y crean un supraministerio”, comentó ayer Montealegre.
Apoyo del PLC
La bancada del PLC se reunió la mañana de ayer para analizar, entre otras cosas, los roces que puedan tener con la constitución los cambios a la ley 290 que solicitó el Ejecutivo con trámite de urgencia.
El diputado Maximino Rodríguez, jefe de bancada, dijo que se alcanzó el consenso, para favorecer el tramite de urgencia, y aseguró que como ya han pasado varios días desde que se solicitó el carácter de urgencia éste ya no debe verse como tal, “de hecho ya no tiene carácter de urgencia”.
No obstante el diputado Noel Pereira Majano, quien se opuso a respaldar el carácter de urgencia, insistió en que si bien es sano presentar las mociones “siempre hubiera sido bueno que fuera a comisión porque se da oportunidad de reflexionar y de calcular lo que se va a hacer y no hacerlo a la ligera”.